Los tiempos han cambiado mucho en cuestión de unas décadas. La pareja estable ha dado paso a nuevos modelos de familia. Ta vez, conviene preguntarse por los motivos del divorcio en la sociedad actual. En primer lugar, para tener en cuenta este elevado índice de separaciones conviene tener en cuenta que ahora el ser humano vive más tiempo.
Es decir, la convivencia tanto para lo bueno como para los malo también es mayor. Y no es fácil soportar los momentos de dificultad como por ejemplo, las diferencias, las peleas constantes, o incluso, la infidelidad. El divorcio es un proceso que a nivel emocional produce resentimiento, tristeza y rabia. A veces, también esperanza puesto que supone una liberación poner punto y final a una historia que no funciona.
Por otra parte, en relación con el elevado índice de rupturas conviene tener presente que ahora, las personas además también conocemos a más gente a lo largo de nuestra vida. Este cambio se puede ver especialmente en la mujer puesto que ahora goza de una independencia y está totalmente integrada en la vida laboral. Por el contrario, hace unas generaciones la labor fundamental de la esposa era la de ser ama de casa.
Cuantas más personas conoces a lo largo de tu vida más posibilidades hay de que en algún momento tus sentimientos puedan cambiar. Lo cierto es que uno de los errores principales de la pareja es precisamente el de dar demasiado peso al sentimiento, es decir, el amor es mucho más porque la emoción como tal es pasajera y efímera.
Por esta razón, ante el desamor es importante no darse por vencido a la primera. Y aunque parezca tópico, es mejor dar tiempo al tiempo y no tomar una decisión drástica bajo los efectos de una emoción negativa como la decepción o la ira.
Los motivos del divorcio surgen principalmente ante la dificultad de hacer frente a la rutina de la convivencia donde a veces surge la apatía como una emoción que destruye la ilusión de la pareja. Ante la rutina hay que actuar y no dejar que sus efectos sean devastadores para el corazón.
Es posible llegar a acuerdos con la pareja para compartir tiempo en común pero también para poder hacer planes con los amigos y la familia. Es necesario tener la inquietud de organizar planes para sorprender al otro con una cita romántica, a través de un regalo que lleva tiempo buscando o mediante una nota que contiene un mensaje de amor.
Además, en caso de que sea necesario también es posible acudir a un experto con el fin de mejorar la comunicación en el seno de la pareja. Gracias a la ayuda profesional será posible reforzar los puntos de unión entre ambos y quitar peso a las diferencias.
