Reestructuración de la Deuda en Grecia e Irlanda:
El estallido de la burbuja inmobiliaria en el 2008 provocó el hundimiento del castillo de naipes económicos de los países PIGS (despectiva abreviatura anglosajona que englobaría a España, Portugal,Irlanda, Italia y Grecia) .La economía de dichos países se ha basado en el último decenio en la conocida ‘dieta mediterránea’, cuyos ingredientes principales eran el ‘boom’ urbanístico, el turismo y el consumo interno, y que creaba excelentes platos minimalistas, de apariencia altamente sugestiva y precio desorbitado, pero vacíos de contenido culinario y con fecha de caducidad impresa: 2008.
Así, la deuda pública griega supera ya los 340.000 millones de euros y agrava la situación económica del país, con un déficit del 10,3% de su Producto Interior Bruto (PIB) en 2010 y según medios de comunicación griegos, Atenas consultará a la Unión Europea (UE) y al Fondo Monetario Internacional (FMI), que vigilan la puesta en práctica de un plan de austeridad con vistas a tal reestructuración, existiendo el temor de que podría incumplir sus pagos (necesitará 60.000 millones adicionales, por lo que será necesaria una refinanciación).
En el resto de países de la actual eurozona, asistiríamos a la formación de Gobiernos de Coalición similares al alemán como diques de contención ante la severa crisis económica y de valores que se avecina para el próximo decenio, demostrándose claramente ineficaces y provocando la aparición en la escena política de líderes con fuerte carisma personal y poder de convicción que derivarán en la práctica en gobiernos presidencialistas con claros tintes autocráticos.
Por otra parte, los países europeos integrados en la NATO se verán obligado a asumir una mayor responsabilidad en misiones internacionales y atender la petición del Presidente Obama de un incremento sustancial de tropas aliadas en Afganistán, por lo que no sería descartable una reafirmación de la soberanía francesa que se plasmaría en la salida de las tropas francesas de Afganistán antes de las Presidenciales del 2.012 (y por mimetismo de otros aliados europeos), dejando a EEUU en soledad y con el riesgo evidente de una peligrosa vietnamización del conflicto afgano.
Mención especial merece el caso del Reino Unido en el que convergen una mayor exposición a los activos tóxicos (hipotecas subprime), a los activos inmobiliarios y una libra revalorizada que ha estancado sus exportaciones, por lo que se verá obligado a realizar sucesivas bajadas de tipos de interés, implementar medidas cuantitativas (Quantitative Easing) para incrementar la base monetaria, depreciar repetidamente su moneda para estimular sus exportaciones y tras retornar los conservadores al poder liderados por David Cameron y fieles a su política euroescéptica y a la nula voluntad británica de embarcarse en un proyecto en decadencia en el que la soberanía británica estaría supeditada a los mandatos de Bruselas, podrían abandonar la UE y pilotar finalmente la nave capitana de una revitalizada Commonwealth.
Incierto futuro de los países emergentes de Europa Central: El resto de países no integrados en dicha órbita (Países del Centro y Este de Europa, integrantes de la llamada Europa emergente), sufrirán con especial crudeza los efectos de la tormenta económica al no contar con el paraguas protector del euro y se verán obligados a depreciar sucesivamente sus monedas, reducir masivamente su crecimiento,a aumentar espectacularmente su Deuda externa y padecerán alarmantes problemas de liquidez (con agujeros financieros estimados en 90.000 millones de euros para el 2009 y 50.000 millones para el 2011) y deberán retornar a economías autárquicas tras sufrir masivas migraciones interiores al descartar la CE la modificación de las reglas para la adopción del euro en la Unión Europea (UE) y así poder acelerar la adhesión de los Estados miembros del centro y este de Europa.
Igualmente, deberán proceder a la reapertura de abandonadas minas de carbón y obsoletas centrales nucleares para evitar depender energéticamente de una Rusia que conjugando hábilmente el chantaje energético, la amenaza nuclear disuasoria, la intervención militar quirúrgica y la desestabilización de gobiernos vecinos «non gratos» irá fagocitando a la mayoría de estos países abandonados a su suerte por la Unión Europea en aras de asegurarse el abastecimiento energético de gas y petróleo rusos.
Además, la agudización de la crisis económica podría acelerar la entrada en vigor a finales del 2012 de la» Directiva de Retorno», eufemismo bajo el que se esconde un severo recorte de los derechos humanos de los inmigrantes y bautizada por Evo Morales como «La Directiva de la VergÁ¼enza » y s us efectos serán dramáticos, pues se calcula que que en los veintisiete países de la Unión Europea viven entre 4 y 8 millones de inmigrantes indocumentados, (de los que casi tres millones serían de países andinos pobres o golpeados por conflictos como Perú, Colombia, Ecuador , Bolivia y Paraguay ) y la aplicación de la expulsión masiva originaría serios problemas de viabilidad económica, (sobre todo en Ecuador y Bolivia cuyas remesas de inmigrantes supusieron en el 2007 el 10% del PIB) y cuyo retorno anticipado podría suponer una debacle económica y social para dichos países,
Finalmente, en Turquía podría reeditarse el Golpe de Estado de 1.960 que acabaría con el mandato democrático del AKP (partido de tendencia islamista conservadora pero a la usanza de los partidos democristianos europeos) debido a la alta inflación, galopante tasa de paro y una deuda desbocada y sin el paraguas protector de la UE (al rechazar su adhesión como Miembro de pleno derecho), es previsible que el ejército protagonice el enésimo golpe de estado que acabaría con el mandato del Primer Ministro Erdogan, surgiendo posteriormente un sistema político fracturado que producirá una serie de coaliciones de gobiernos inestables en el parlamento turco.
GERMÁN GORRAIZ LOPEZ