(Permítame el lector, eso sí, que me aferre a mi derecho a la licencia literaria y otorge a un simple ayuntamiento atributos fiscales y legislativos que en la realidad no tiene, pero que servirán para el placentero discurrir de esta narración).
“Ciudadadanos y ciudadanas de Alcantarilla del Tajo,
Por la presente hago saber que desde hoy en adelante este Ayuntamiento, del que acabo de ser elegido Alcalde, no cobrará ningún Impuesto o Tasa a ningún ciudadano empadronado en nuestro municipio, por lo que nadie, absolutamente nadie, tendrá la obligación de tener que abonar cantidad alguna en materia impositiva.
El objetivo de esta medida es la consecución de la eficiencia económica plena, ésa que sólo puede otorgar el funcionamiento social basado única y exclusivamente en la siempre eficiente ley de la oferta y la demanda. Por lo que serán las partes implicadas las que deberán acordar el pago proporcional de cualquier aspecto que hasta el día de hoy era realizado por este, vuestro Ayuntamiento, que, a partir de ahora, se limitará a determinar a esas partes implicadas e intermediar en la negociación.
Evidentemente, este Ayuntamiento carecerá de ingresos propios, por lo que no proveerá de ningún servicio público ni concederá subvención de ningún tipo. El mantenimiento económico del personal que ejerce su labor dentro de la Casa Consistorial será a costa de los ingresos generados por la privatización de las empresas públicas y posteriores intereses financieros de estas cantidades.
Alcantarilla del Tajo, 15 de agosto de 2007
El Alcalde del municipio de Alcantarilla del Tajo
Juan María de la Torre Antunez”
Ni que decir tiene que la publicación de este bando municipal generó gran algarabía y alboroto entre los habitantes del pueblo, que durante la siguiente semana se dedicaron a comentar, debatir, criticar y apoyar, todo a una, lo que en él se podía leer.
En general, eso sí, había una ola de opinión favorable a las medidas que allí se anunciaban y todos se ilusionaban ante la idea de no tener que pagar ningún impuesto en adelante.
(Continuará)
