Sociopolítica

Gran Guiñol

Pepe Sancho va a reestrenar Los intereses creados. Da en la diana. ¡Izquierda, derecha, izquierda, derecha, izquierda! Eso gritaban los sargentos en la mili. Ahora lo gritan quienes mandan. Los españoles son clase de tropa. Les dicen que marquen el paso, y lo marcan. Borreguitos norit de chufi en las venas. ¡Y aún hay quien se enorgullece de ser español! Muflones muertos, venados vivos y cazadores cazados en un coto de tiro al PP. ¿Caza? No. Hecho cinegético y actividad social de contacto con la naturaleza. ¡Caramba! Eso es como llamar a los campos de exterminio nazis actividad social de contacto con los judíos. Un Gran Jefe de piel roja la tiñe de amarillo en la Sexta de Caballería y un alcalde piripi lo alaba mientras da bandazos. Se indigna, por cierto, de que le achaquen intoxicación etílica cuando eso sería circunstancia eximente. In vino, perdón. Se emborrachó Arrabal en la mejor secuencia de la historia de la tele y acaba de estrenar una ópera en el teatro donde nunca estrenó nada, en vida, Albéniz. El Bigotes estuvo en el prisma histórico (¡qué cursilada, ministro!) de la basílica de El Escorial. ¡Maldita sea!, pensará ahora, con la Correa de su amigo de Madrid al cuello, ese Cantinflas de guardarropía. ¿Por qué no me acogí a sagrado? Una emperatriz de Génova se exhibe en enaguas, y todas las manolas y chisperos de la corrala nacional aguzan los ojos para verle los adentros. Decepción: no es la Chávarri. Fiesta sorpresa para Rajoy, atentos al pajarito, fogonazo ―el de las bombillas made out of Spain del ministro autárquico― y museo de figuras de cera a dos manzanas del de Colón. En ese retrato gazmoño de familia mal avenida hay alguien que tiene voz propia, pero van a por ella y puede quedarse en lo que su nombre de pila indica. Centenario de Larra. Vuelva usted mañana. ¿Mañana? ¡Pero si carecemos de futuro! En nuestras calendas sólo hay un año: el de la marmota. Así ha sido siempre y siempre será así, decía Sinuhé. De Franco a Zapatero. Sobraban las alforjas. ¡Vista a la izquierda! ¡Vista a la derecha! ¿No hay nada al frente? Sí, el abismo. ¡Ar! ¡Menuda tropa!, exclamaba Romanones. Valle-Inclán, en Romance de lobos, una de sus Comedias Bárbaras, añadía: ¿sois almas en pena o sois hijos de puta? ¿Bárbaras? ¿Lobos? Carga la suerte, Pepe. Ferraz, Génova, las Cortes, las Generalidades y las particularidades: intereses creados y por crear. ¡Arriba el telón! He aquí el tinglado de la antigua farsa.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.