Economía

La Ínsula Barataria (Soluciones de la Unión Europea a la crisis)

El fin de semana da para resolver crisis matrimoniales, para seguir fracasando en el noble esfuerzo de ponerse en forma, para olvidar las tensiones del día a día en el trabajo, para llevar a los niños al parque, para lavar el coche, para visitar a la suegra y, si eres un mandatario europeo, para resolver la crisis económica.

O al menos eso es lo que deben de pensar los gobernantes de los países que conforman la Unión Europea que tan ufanos ellos se han reunido este fin de semana para encontrar una solución conjunta a la crisis económica, aunque, mucho me temo que al final se han limitado a repetir, cuál loro de feria, las medidas que ya se venían barajando en los últimos meses. La pregunta es evidente, ¿para qué se tienen que reunir entonces?

Pues bien, tras arduas deliberaciones y ponencias más o menos rigurosas y claramente retóricas, la Unión Europea ha decidido que las mejores medidas para poner freno a la crisis económica son las siguientes (son todas las que están, aunque no están todas las que son, por negligencia del que escribe, por supuesto):

1. Garantizar el control a las entidades financieras: Es evidente que el mundo financiero actual está mucho más globalizado que la sociedad o que las relaciones comerciales en términos generales. Por ello, es totalmente necesaria la creación de un Organismo Supranacional de control que se asegure del correcto funcionamiento de todos los productos financieros e intervenga en caso de que sea necesario. Lo ideal sería un Organismo mundial, aunque mucho me temo que, de momento, nos tendremos que conformar con un Organismo Europeo.

2. Asegurar la transparencia de las operaciones financieras: Hasta ahora las operaciones financieras de alto nivel estaban basadas en complejos algoritmos econométricos que los profanos en la materia eran incapaces de digerir. A partir de esta crisis se busca asegurar la transparencia de todas estas operaciones, que no sea necesario haber estudiado en la Universidad de Salamanca (perdón por el guiño provinciano) para comprender de donde viene el dinero y hacia donde va.

3. Eliminación de los paraísos fiscales: Un país se convierte en paraíso fiscal cuando no revela nunca los datos financieros de los clientes de sus entidades, aún cuando sean relevantes para una investigación judicial, amén de incentivar la presencia de los fondos de estos clientes con suculentos beneficios fiscales. Pues bien, la Unión Europea quiere terminar con estos paraísos y para ello llegará a acuerdos con dichos países para concluír con este expolio legal que todos estábamos sufriendo.

En definitiva, nada nuevo bajo el sol, y todos los ciudadanos de esta vasta unión con la terrible sensación de estar viviendo en la Ínsula Barataria de Cervantes.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.