Ciencia

CAMBIO DE PARADIGMA

Los cambios en el modelo paradigmático establecido han sucedido desde siempre. Heraclito, (siglo V aJC) ya se percató de que la sociedad estaba en un continuo cambio.

Platón fue el primero en utilizar el termino paradigma (de griego patrón) para definir las estructuras en las que se sustentas los modelos concretos de realidad social y de conocimiento, en un determinado espacio-tiempo. Forman un conjunto de confluencias en valores, en formas de pensar, de sentir y de obrar, en costumbres y técnicas que conforman las pautas y creencias de un determinado grupo social en una determinada época.

Los paradigmas que definen civilizaciones no paran de evolucionar debido a que surgen dentro de ellas anomalías que cuando alcanzan un punto crítico, el modelo comienza a ser cuestionado iniciando el cambio. Durante esta transición hacia un nuevo paradigma, las incertidumbres surgidas provocan confusión entre lo viejo conocido y lo nuevo que se avecina.
Las civilizaciones actual están en un proceso de cambio acelerado propiciado por el colapso financiera mundial, los fraudes, la corrupción y los nuevos conocimientos de la ciencia y las posibilidades tecnológicas. Dentro de este contexto, el valor de la vida como fuente de riqueza pertenece al nuevo paradigma, entendido este como un conjunto de conocimientos y creencias que forman parte de una visión del mundo, de un imaginario social, de valores, apreciaciones, gustos, ideales y conductas.

Para Thomas Khun: “cada paradigma delimita el campo de los problemas que pueden plantearse, con tal fuerza que aquellos que caen fuera del campo de aplicación ni siquiera se advierten”. A lo largo de toda la historia las personas defensoras de las ideas dominantes del poder hegemónico, han descrito toda innovación intelectual como errónea o equivocada, hasta que en un determinado momento ha sido asumida y considerada como propia.

Arthur Schopenhaue sostenía; “Toda verdad atraviesa tres pasos: Primero, es ridiculizada. Segundo, es opuesta violentamente. Tercero, es aceptada como evidente”.
Para que se produzcan cambios en el paradigma se hace necesario empezar a describir las características de lo nuevo, en términos de lo viejo. No se puede crear nada reconocible como real fuera de la forma del conocimiento dominante.

El nuevo paradigma plantea propuestas que no suplantan, sino que complementan, al viejo. Es resultado de las posibilidades que nos brinda la ciencia y la tecnología en el nuevo orden mundial, que permite un nuevo modelo de organización global respondiendo a una nueva forma de definir y dar prioridad, principalmente, al problema endémico del hambre y la miseria. Para que el nuevo paradigma se institucionalice debe responder a los cánones del método empírico, sus conclusiones se tienen que poder comunicar a la comunidad, y otros deben poder contestarlas.

Tiene que crear un repertorio de soluciones organizado, y sus métodos de trabajo tienen que ser transparentes .
La creación de una nueva cultura global entorno al valor de la vida como fuente de riqueza necesita de un nuevo imaginario social, de una nueva forma de entender el mundo y las relaciones humanas. Las nuevas ideas, no existen en la realidad material, pero si pueden existir en la imaginación individual y en el imaginario colectivo, produciendo efectos de realidad, facilitando los cambios en el  paradigma. Son los medios de comunicación masivos los que tienen que intervenir de forma activa en la difusión de la nueva cultura de la dignidad humana trasladando al imaginario colectivo los conceptos y regulaciones del nuevo paradigma. Este imaginario entorno al valor de la vida no debe ser  impuesto por la sociedad, sino que la información debe ser trasladada al individuo para que cree inconscientemente su propio imaginario individual, que luego se transformara en colectivo, en la medida en que coincidan las valoraciones entre los individuos de la colectividad.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.