Sociopolítica

España, el fútbol y los políticos

España, el fútbol y los políticos

 

            Los políticos (y es un decir lo de políticos) están locos de contentos, sobre todo los que dicen gobernar en el gobierno central o en las diferentes “autonosuyas” o nuevos virreinatos; puesto que la selección española, ha logrado llegar al final de esa competición mundial que tiene lugar en Sudáfrica.

            Y están contentos (sobre todo el nefasto, devastador y fanfarrón Zapatero) por cuanto esos hechos, han entretenido a las masas y las siguen entreteniendo, con lo que ganan tiempo los que dicen gobernar y así a ver si se van produciendo los milagros que necesitan, puesto que por su hacer y hasta hoy, poco podemos esperar ya que… “la casa sigue estando sin barrer y rebosante de basuras y parásitos”.

 

            Pero si yo fuera político en semejantes circunstancias; yo lo que estaría es preocupado; muy preocupado, puesto que esas masas, posiblemente con la inconsciencia que las caracteriza, pero han hecho una causa común y política de primera magnitud, puesto que no ha sido nada más y nada menos que… “consagrar a una España única, con una única bandera y con un fervor patriótico que nunca se había visto en esta peculiar piel de toro ibérica”.

 

Con ello dan una lección enorme a toda esa nefasta clase política que pese a ser mantenida por los recursos españoles en su conjunto, niega o reniega de una patria común, de un idioma común y de unos intereses generales y comunes a una unidad, que reitero, se demuestra en una simbólica batalla o batallas que tienen lugar a muchos miles de kilómetros del solar patrio, pero que en el mismo, resuenan con un vigor que ya quisiéramos ver en tantos casos mucho más importantes que el fútbol y que tenemos encima, pesando como losas sobre la mayoría de nosotros.

            Y reitero, es curioso, sorprendente y al propio tiempo maravillosamente edificante; que esa bandera (negada tantas veces en lugares donde debiera ondear y por derecho propio) haya sido enarbolada por enormes multitudes, incluidas las de esos territorios donde se la niega (incluso la han quemado en público) y enarbolando la misma, salen a la calle a celebrar esa victoria (denominada deportiva) como un algo inconmensurable por el calor y el gozo que demuestran millones de españoles, que en ese momento se sienten e identifican plenamente como tales.

            Más curioso y resaltable es el que precisamente el gol de la victoria sobre los jugadores alemanes, lo produzca un catalán de Lérida, el que hoy es vitoreado como un héroe victorioso de algo grande e incomprensible por lo que en sí es la realidad.

            Y digo esto por cuanto no podemos olvidar “las enormes primas”, que cobrarían estos jugadores, si de verdad lograsen ganar este campeonato mundial.

Por tanto es comprensible que esos jugadores y ya “con la miel en la boca”, estén pensando mucho más en el enorme capital que esperan recibir en forma de muchos millones de pesetas, que en nada patriótico y otras zarandajas… pero en fin… “allá cada cual con su ser y sentir”.

            Pero lo importante –reitero- es la fuerza patriótica que esos hechos ha insuflado a infinidad de españoles, la mayoría de los cuales, estoy seguro que ni saben el origen de esa bandera y del propio idioma común; ambos son lo mismo y tienen muchos siglos de Historia, puesto que esos colores ya los tenían los reinos españoles en la edad media y simplemente, fueron evolucionando al actual escudo y bandera, que no son otra cosa que una continuidad en la identidad de España; y al igual que el idioma, que del primitivo castellano, datado en un monasterio riojano, al actual idioma español e internacional, tienen tan larga historia que ningún país europeo los supera… no hablemos del resto de países, que decimos… “civilizados”.

 

            Veamos si esa lección la han aprendido los inútiles y nefastos políticos que negando su propia identidad, sólo piensan con… “la panza y el bolsillo”; y está claro que por ello mismo nos han llevado a donde ahora estamos… “en ninguna parte”.

 

Antonio García Fuentes

(Escritor y filósofo)

www.jaen.ciudad.org (allí más)

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.