Economía

La ceguera del Banco Central Europeo

Por pura deformación profesional, Trichet y su consejo ejecutivo, están obstinados en centrar todo su análisis de la situación económica actual en función de las variables financieras, meros instrumentos para el control de la economía real, olvidándose de los conceptos esenciales de la cohesión social y de la supervivencia de los ciudadanos.

Porque el manejo del tipo de interés sólo sirve para acelerar o frenar una economía en movimiento, y la economía europea se encuentra, en estos momentos, totalmente estancada por lo que reclama reformas de mayor calado que la mera oscilación del tipo de interés.

En la reunión de hoy, han decidido, como ya habían anunciado hace un mes, mantener los tipos de interés para este mes, pero han anticipado que el próximo mes de julio lo incrementarán, seguro en 0,25 puntos porcentuales, lo cuál revertirá en el incremento del Euríbor durante todo este mes de junio, perjudicando la circulación del crédito, bastante perjudicado de por sí, y en el encarecimiento general de todos los productos financieros.

Si el Banco Central Europeo tuviera la capacidad para mirar más allá de las gráficas financieras que ven en la pantalla de su ordenador, comprenderían que la situación actual requiere de otro tipo de actuaciones, actuaciones que sí está llevando a cabo la Reserva Federal, y que están consiguiendo que Estados Unidos con los mismos problemas financieros y fiscales que Europa, o incluso peores, se encuentre en cifras de crecimiento significativo y en una clara tendencia de creación de empleo. Europa, mientras tanto, se limita a mirar con envidia malsana.

Sin embargo, y como siempre te digo, Trichet y su gente no tienen toda la responsabilidad, ya que se limitan a seguir a pie juntillas la literalidad de sus estatutos, sin proceder a la necesaria interpretación adecuada, eso sí, pero sin incumplir ninguno de sus mandatos, dictados desde el nacionalismo heterodoxo de los países miembros de la zona Euro.

Por tanto, si la Unión Europea quiere crecer en su proceso de integración y ofrecer una imagen creíble al resto del mundo, debe modificar estos estatutos de manera urgente, y permitir que el Banco Central Europeo crezca en sus competencias facilitando la estabilidad económica.

Hasta entonces, no nos queda otra que seguir echándonos a temblar con cada nueva reunión del BCE.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.