Sociopolítica

Un millón… vivo o muerto

 Como en los peores tiempos de aquel “Oeste americano” y donde fue implantada la tristemente famosa ley de Linch (Charles de nombre y famoso por esta ley, la que implantó pese a ser cuáquero y por tanto de una iglesia de paz… o quizá por ello mismo)… y que hemos visto en diferentes películas norteamericanas, que tanto nos han recreado las estampas de aquel “salvaje Oeste”; y donde el ahorcado en cualquier lugar; era la estampa de esa ley. Pues bien, los norteamericanos siguen empleando “cosas así”; y a los hechos de esos presos secuestrados en cárceles especiales y donde la tortura ha sido algo cotidiano; eso sí… “tapado y bien tapado, hasta que otros lo destaparon”.

 

Los norteamericanos también se han servido y se sirven de “cualquiera que les interese”; no importándoles color de piel, religión y demás signos identificativos… pero cuando ese “sicario” no les es de utilidad; lo eliminan de la forma que sea; y al escribir esto me estoy acordado del tan cacareado Ben Laden; el que no hace mucho fue eliminado y sus restos tirados al mar… “simplemente ya no interesaba”; pero no olvidemos que los creadores de tal “angelito”, fueron los propios USA, con los que trabajó largo tiempo y de ello hay informes en la red como para escribir un libro.

 

¿Pero así obran sólo los gobiernos norteamericanos? No, que va; en ese “negro deporte” participan otros; y lo hacen de grado o a la fuerza, puesto que al ir… “enganchados en el mismo carro, han de tirar del mismo y a las órdenes del mayoral”… Y eso es lo que ocurre en Irak, Afganistán y por último en Libia, donde en estos días que escribo y visto que a Gadafi no lo pueden controlar o matar; los USA ponen precio a su cabeza y ofrecen nada menos que un millón de dólares por la misma… seguro que pensando que a algún beduino (o no beduino) más o menos cercano al que hoy es considerado como tirano… le pueda pegar un tiro y ofrecer la cabeza para cobrar esa cifra, que en Libia, debe representar una fortuna como para… “tener camellos, mujeres y sirvientes abundantes, amén de las jáimas de mejor calidad y por tanto más confortables, para los señores que aman al desierto”.

 

Algo similar han realizado con el antes “consentido y muy bien cuidado”, dictador egipcio, Hosni Mubarak; al que junto a sus hijos, está siendo juzgado; “por crímenes cometidos últimamente, en las revueltas de este mismo año”; por lo visto los crímenes cometidos durantes las décadas anteriores y en las que ha sido “el moderno faraón egipcio”; esos muertos o torturados, no cuentan para nada. Es por lo que hemos visto al antes poderoso faraón, metido en una jaula cual si de una fiera de la selva se tratase y en esa “postura”, va siendo juzgado hasta el final… si es que antes no le llega (“o le producen”) la muerte, puesto que es ya bastante anciano y bastante enfermo… “Cosas veredes Sancho… se dice en El Quijote de Cerbantes (firmaba con “b”) y es verdad, aquel “manco” escritor había visto mucho… ¿qué escribiría hoy?

 

Antes a este (como a tantos otros) los han recibido en los más lujosos salones de múltiples países; siendo agasajados y reconocidos por presidentes de república o incluso por “testas coronadas”; se les han dado grandes banquetes, regalos, parabienes y lo que fuere menester… entonces eran, “seres interesantes y miembros del carro que mueve al mundo… al mundo del dinero y del poder internacional”… hoy ya no son nada.

 

También ellos han hecho regalos costosos… aquí en España, “le regalaron un soberbio caballo al entonces presidente Aznar; no sabemos lo que le regalarían al rey.

 

No digamos lo acaecido con el dictador libio (Muamad el Gadafi), al que le han dejado plantar su jaima, en cualquier lugar del mundo, donde “al califa del desierto”, le ha dado su real gana… incluso en Italia, se permitió reunir a unos cuantos cientos (creo que se presentaron miles) de italianas elegidas, por su presencia y porte femeninos; para no recuerdo que tipo de gala organizada por este caprichoso nuevo rico del petróleo; el que quizá ya ni le funciona “el bolígrafo”… pero sí la vista y el deseo, de quién ha estado sobrado de mujeres y del inmenso dinero que le ha dado el petróleo; pero al que y por lo que sea, han querido (y siguen queriendo) eliminar, puesto que ya no les interesa que el tal individuo, siga controlando ese petróleo que es la base del poder en el mundo de hoy… “puesto que es algo así como la sangre para un cuerpo vivo”.

 

Y eso es lo que hay… incluso la españa o españilla actual; la han metido en ese berenjenal; al que tiene que ir y estar, mientras “el mayoral así lo ordene”; y no valen ni ruinas nacionales, ni otro tipo de cosas… “hay que contribuir en los gastos de guerra de esas guerras que marca, emprende, mantiene y ejecuta el poder antes mencionado”.

 

Pero la verdad, todo esto y a mí… y a mi vejez, ya me causan… aparte del asco que quieran imaginar; también la risa impotente con la que se me calman otros sentimientos; puesto que ya digo… la impotencia obliga a llorar o reír… y yo ya prefiero lo segundo, puesto que ya me río de mí mismo… y hace muchos años de ello.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.