Sociopolítica

Miedo al hoy… miedo al mañana…?

¿Por qué no hay que temer al miedo?…

            Lo escribí hace mucho tiempo… “el miedo es el motor de la vida”; puesto que el miedo es consustancial al ser humano (pienso que a cualquier ser vivo de sangre caliente, fría, “sin sangre” o incluso con savia vegetal)… El miedo (pues) es algo que el Universo “inoculó” en este planeta (“no sé en el resto”) y por tanto debe ser algo esencial, necesario o imprescindible para precisamente fortalecer al individuo y no destruirlo… ¿Así es que… por qué tener tanto miedo y no saber irlo venciendo?

 

Yo tuve miedos… muchos miedos y desde niño pienso que incluso lactante… puesto que mi madre me dio la teta, habiendo sido asesinado mi padre y aquella mujer lloraba continuamente… y sabido es que “con la teta” se transmiten muchas cosas más.

 

Luego fui creciendo y en aquellos años terribles de la posguerra civil, había muchos miedos y a los niños… se nos asustaba de múltiples formas (“el coco, el tío del saco, el ogro, el sacamantecas, etc”). Los castigos corporales, eran el orden del día y la disciplina familiar igualmente (cosa positiva por demás) puesto que aprendimos lo que eran los mayores y los viejos o ancianos, a los que había que respetar y obedecer.

 

Fui creciendo entre los miedos; los que por si faltara poco… “aquellos curas de larga sotana y vestidos de negro como lo cuervos de Sierra Mágina”; en sus prédicas “misionales o misioneras”; nos presentaban una vida más tétrica que llevadera; nos metían en el ser, “lo terrible del pecado mortal y que nos llevaría al infierno”; por lo que predicando cuantos motivos u ocasiones habría para pecar… “yo llegué a estar seguro que terminaría en el infierno y quemándome vivo por los siglos de los siglos… amén”.

 

Por lo que terminé repudiando aquel dios tan terrible que aquellos curas me presentaron.

 

Luego seguí teniendo miedos y así he seguido hasta que ahora y recién cumplidos los setenta y tres agostos… sigo teniendo miedos. Miedos a la vejez y al no poder valerme por mí mismo (padezco una enfermedad coronaria y crónica), a quedarme sólo, puesto que a mi esposa acaban de operarla de un cáncer de colon y con posibles ramificaciones en “lugares más complicados y peligrosos”… pero y como siempre he conseguido; espero vencer mis miedos como antes vencí a los múltiples otros y sin necesidad de drogarme, emborracharme y menos huir “de mi destino”.

 

Yo no tuve “trabajo fijo nunca”; desde adolescente emprendí el camino de “la libre empresa” y anduve muchos caminos… en muchos fracasé, pero en otros muchos no fue así… y hoy puedo vivir, no gracias a la miserable pensión que el miserable Estado Español me pasa como autónomo (647 euros mensuales, tras ocho años de “subidas” Y y cuarenta anualidades cotizadas) sino gracias a mi buena administración a lo largo de muchos años “de miedos” y al ahorro que fui acumulando “entre tantos miedos”; es por lo que a mí no me afectará esa crisis económica que a tantos afecta, que tantos temen y que a algunos aterra…

 

¿cuántos de ellos quemaron cantidades importantes de dinero en absurdos o necesidades vicio, en vez de irlos ahorrando para un futuro en que podrían necesitarlo?

 

Aún con mis muchos miedos, empecé a escribir hace ya más de cuarenta años y lo sigo haciendo casi a diario; y lo hago ya sin pretensiones algunas… simplemente decirme a mí mismo y al que quiera leerlo… que sí, que pasé muchos miedos y con ellos muchas experiencias, que son las que hoy me hacen escribir con la mayor tranquilidad en que nunca lo hice… “pues algunas veces, escribiendo o hablando por un micrófono en una emisora de radio donde permanecí nada menos que diecinueve años y trabajando gratuitamente, “o por amor al arte”… los sudores y los miedos me hacían sufrir bastante”.

 

Curiosamente hoy mismo cuando escribo, un visitante a uno de mis artículos que inserto en diferentes foros, se lamenta, llora y plañe por los eternos miedos… y al que “un poco cabreado” le he dicho lo que sigue.

 

Me da pena ese miedo al futuro que al parecer todos padecen… EL FUTURO ES HOY, HOY EL DÍA QUE VIVIMOS… MAÑANA PUEDES AMANECER MUERTO; más o menos eran los consejos de los sabios estoicos y hace dos milenios o más… “vive hoy, no hagas mal a nadie, acuéstate tranquilo y mañana haz lo mismo”… ¡¡A qué tanto miedo al futuro!! Sólo ese miedo es una terrible enfermedad que acaba con los débiles”.

 

Por otra parte sepan que miedo… tiene el rey, el presidente del gobierno, todos los ministros políticos o religiosos y sean de donde sean; los ricos y los más ricos de los ricos y así todos… “el miedo –reitero y afirmo- es consustancial al ser vivo; pero precisamente ese miedo se presenta por cuanto hay forma de vencerlo… “el secreto, que no es secreto… es echarle cojones y vencerlo”… y luego, seguir adelante, pidiéndole a Dios (“o a lo que sea”) que nos de fuerzas para llegar en pie hasta el último momento en que una piadosa muerte, por fin… “nos libere de tantos miedos” y no importándonos ya nada de lo que habrá o no habrá, tras esa piadosa muerte. Simplemente procuremos que al llegar ese momento… “nuestra conciencia está mucho más tranquila que… alterada”.

 

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.