Sociopolítica

La rebelión de… “los enchufados”

El teatro de la política ha quebrado en España (españa o españilla, puesto que la han hecho pedazos); los administradores del tal “teatro”; se comieron las reservas que había (que eran muchas y saneadas hace 35 años); luego vendieron el rico mobiliario del edificio y demás elementos de valor y por tanto mercadeables o fungibles a cambio de dinero; después montaron “espectáculos” llamativos y sin bases económicas y menos de futuro. Con ello movieron enormes cantidades de dinero, muchos se hicieron ricos aquí (puede que en los paraísos fiscales existan capitales extraídos del dinero del contribuyente que ni nos imaginamos, pero que irán apareciendo: puesto que el dinero no puede ocultarse y aparecerán indicios o visos de los nuevos y ricos buitres políticos)… pero el resultado y como una gran mentira que era, ha sido el enorme empobrecimiento de masas de indefensos contribuyentes, a los que engatusaron para consumir mucho más de lo que podían; y lo que les ha producido una ruina espantosa y de la que ni saben como salir, puesto que no hay salidas ni las va a haber en mucho tiempo.

 

Agotados todos los recursos, siguieron con un endeudamiento “a lo loco” y sin sopesar las consecuencias finales; o peor aún, sabiéndolas, y sabiendo igualmente; que hicieran lo que hicieran saldrían indemnes, con la cartera llena y con pagas para el futuro que ni en “los tiempos de Franco se conocieron”; ejemplo cumbre y vergonzoso “de la mayor vergüenza”, lo que tendremos que pagarle al devastador y exterminador Rodríguez Zapatero y de por vida; cuando la lógica “más humana y sobre la justicia natural”; es que este individuo, junto con muchísimos más, tuviesen que sentarse ante un tribunal medianamente justo y fueran juzgados por todo el daño que ha producido a millones de indefensos súbditos (que no ciudadanos) que no han podido hacer nada en absoluto para defenderse.

 

En definitiva; que entre hunos y los otros (todo el que ha mangoneado el dinero público lo ha hecho mal o peor y sálvese el que pueda; por tanto si bien el partido último en el gobierno; destaca, pero no podemos olvidar al resto y en todos los ámbitos) se han cargado “al teatro” (entendamos a España) y lo han dejado tan derruido y vacío, que ya es que no caben ni representaciones, ni tramoya, ni incluso espectadores; puesto que estos últimos del asco que ya sentimos, no confiamos ya en nadie… “de los viejos y acabados”¸ puesto que siete lustros son muchos años y más para los que vivimos los siete lustros anteriores de la posguerra y Franco y que luego hemos soportado estos.

 

Pero tras este ya incalificable “estado de cosas en un Estado cuasi destruido”… ¿qué hacen los que aún mandan y los que pretenden mandar después? (no olvidemos que hay muchos departamentos de poder y donde se mueven ingentes cantidades de dinero, aparte del que mueve el gobierno central)… no hacen nada, o apenas nada; y van pasando los años… ¡¡Sí los años puesto que se llevan varios sabiendo lo que hay y no haciéndole frente a esos terribles hechos!!… y a lo sumo, van tapándose los unos a los otros; pocos (apenas nadie) se sitúa frente a los jueces (y aparentemente hay delitos más grandes que los más grandes dinosaurios y cuyos esqueletos están en los museos) y aún menos, se desparasita España y se reduce la carga parasitaria a grados llevaderos y con la austeridad que marca la época… por el contrario se mueven parásitos de un lado para otro pero siguen cobrando más o menos lo que cobraban… sin producir nada más que el gasto y encima entorpeciendo todo cuanto pueden. Recordemos que en la época del tan criticado Franco, los empleados públicos no pasaron de seiscientos mil y que estos inútiles, nos han cargado con más de tres millones doscientos mil… y seguimos cargados con ellos.

 

Y como el deplorable último gobierno (habría que denominarlo como desgobierno) ha acabado hasta con el partido que lo sustentaba (ya muchos se han revuelto rebelándose); muchísimos de los que y desde que murió Franco, “se engancharon al dinero público y de el han vivido opíparamente”; se están revolviendo más que inquietos, ya desesperados; y es por lo que procuran agarrarse a quién sea y a lo que sea; para que “en la limpieza” que presumiblemente van a realizar las urnas… ellos se queden a bordo de lo que quede a flote, del ya destruido bajel socialista y otros periféricos; puesto que lo primero es la panza y el bolsillo, que es de lo que siempre se preocuparon… “nosotros los del pueblo… pues carne de cañón y como siempre… si bien hoy son otro tipo de cañones y cañonazos”.

 

Por ello hay que sentir (aparte de la rabia e impotencia lógicas) risa plena al oír a esas figuras, que como “santones” nos los han presentado siempre (y cuyos nombres ni merece referir por el desprecio que debemos sentir por ellos)… decir con toda la cara dura (durísima e inalterable como tal) el que… “no van a presentarse en las próximas listas, que ellos ya pasó su época, etc. etc.”… ¡¡Hipócritas; de poder seguir seguirían como siguió Franco y hasta que la muerte lo echó del poder!! En este aspecto son igual que fue aquel caudillo… criticable por muchas cosas, pero felicitable por cuanto y como administrador de los bienes públicos, dio un ejemplo que ya la historia le reconoce y que le reconocerá mucho más, visto el desastre que… “sus herederos han dejado” y que como antes digo, va a durar los años… que ni sabemos aún.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.