Sociopolítica

Por primera vez desde 1939, España pierde población

Huyen en busca de trabajo, de un futuro estable, de unas condiciones de vida dignas que sus países de origen no les brindan. No hablamos de ciudadanos africanos o latinoamericanos sino de residentes europeos que ven cómo la precariedad se instala en su entorno mientras que se recortan prestaciones y se vulneran derechos y libertades. Cada vez son más los españoles, italianos, griegos o portugueses que buscan en el extranjero mejores condiciones laborales, devolviendo de nuevo la visita de los que llegaron a sus países por motivos similares. La crisis económica aprieta cada vez más y el viejo sueño europeo se está convirtiendo en pesadilla para muchos inmigrantes que abandonaron sus hogares y que ahora se ven obligados a emprender el camino de vuelta a casa.

Por primera vez desde 1939, España pierde población. Las causas se encuentran en el descenso del número de nacimientos, el incremento de la emigración y el estancamiento en el número de llegadas. El saldo migratorio vuelve a ser negativo, es decir, salen más que entran. El 90% de las más de 580.000 personas que este año dejan España son extranjeros. El resto, españoles. Se calcula que, en los primeros seis meses de 2011, 317.491 inmigrantes han llegado a España y 356.692 han vuelto a sus países de origen. En el mismo periodo de tiempo, 50.521 españoles se han marchado del país y 34.096 han regresado. La crisis económica es el factor principal de este éxodo. Según estimaciones del Instituto Nacional de Estadística (INE), se perderá a medio millón de habitantes en los próximos diez años. Este dato contrasta con la tendencia de la última década, cuando la población española creció en más de seis millones, fruto del ‘boom’ migratorio que atrajo la bonanza económica y que impulsó el Estado del Bienestar. El flujo de inmigrantes que atravesaba entonces las fronteras españolas podía equipararse al de Estados Unidos.

El perfil del inmigrante español es el de un joven de entre 25 y 35 años con formación cualificada. Busca un sueldo mejor, un alquiler más barato o simplemente un cambio de rumbo. “El materialismo y la falta de valores empuja a algunos a conocer otras formas de vida. Lo mismo se van al desierto o buscan cambiar la televisión por una lumbre en el hogar”, explica el sociólogo de la Universidad de Salamanca Fernando Gil. Muchos de los jóvenes que se marchan están desencantados con el mundo occidental y se sumergen en nuevas culturas. Sin embargo, los expertos opinan que emigran muchas veces por necesidad y que existe una motivación de regreso.

Argentina es uno de los destinos preferentes a la hora de emigrar. El idioma común y la afinidad cultural hacen del país suramericano el lugar perfecto para los españoles que deciden probar suerte fuera. De hecho, conforman el tercer grupo migratorio que no proviene de Latinoamérica, sólo por detrás de los chinos y los estadounidenses. Un estudio de la consultora internacional Adecco afirma que 33.543 españoles llegaron a Argentina entre 2008 y 2010, que coinciden con el comienzo de la crisis económica.

Uruguay también ha recibido inmigración española desde 2008. Este país está considerado como ‘la Suiza de América del Sur’. Su pequeño tamaño, sus poco más de tres millones de habitantes y su bajo nivel de desempleo, en torno al 8%, lo convierten en un lugar idóneo para encontrar trabajo. “La crisis afecta debido a su carácter global, pero a un nivel inferior. Si hasta hace poco el país crecía entre un 8 y un 10%, ahora esa cifra se ha reducido entre el 2 y el 4%. Aún así no está en números negativos”, señalan fuentes del Consulado uruguayo en España.

La salida de grupos de población en edad de trabajar provocará un incremento de la tasa de dependencia en los próximos años, lo que puede comprometer aún más los sistemas públicos de pensiones, de sanidad y de educación de los países desarrollados, sustentados gracias a las cotizaciones de los empleados. Es necesario concentrar los esfuerzos en la organización del sistema del bienestar -basado en estos pilares- mediante la aplicación de medidas urgentes en materia de creación de empleo, fiscalidad, inversión en Investigación y Desarrollo, de igualdad y de racionalización de los horarios laborales. Mientras los gobiernos den la espalda a sus ciudadanos y establezcan como prioridad el rescate de bancos quebrados por las negligencias de unos pocos, Europa continuará su proceso de evacuación en busca de un mundo más cuerdo, más cabal y más justo.

Víctor Martínez González

Periodista

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.