Sociopolítica

Primero prometió y después juró

EL CRISOL   

“En el mes de junio Rajoy, anunció que iba a llevar a cabo modificaciones tales como la reducción de concejales y la unificación de todos los sueldos de los alcaldes”.

Con el rosario de promesas incumplidas por Rajoy, ahora tengo claro porque los políticos de derechas juran y no prometen cumplir con sus obligaciones cuando acceden a un cargo público. Si quebrantan el juramento, con acercarse al confesionario y manifestar su arrepentimiento y su propósito de enmienda y rezar dos padrenuestros y tres avemarías queda todo solucionado. Dios, a través de sus ministros, perdona a todos. Lo de prometer lo hacen en campaña electoral y no recuerdo quien fue aquel político que dijo que las promesas en política se hacen para no cumplirlas. No sé si quien así lo puso de manifiesto estaba pensando en que algún día gobernaría Mariano Rajoy. Partiendo del principio de esta frase, se puede decir que Mariano Rajoy no ha engañado a nadie, prometió y prometió y luego no cumplió. El que se sienta engañado o estafado por lo que está haciendo el presidente del Gobierno es porque no tuvo en cuenta esa advertencia. Avisados estábamos.

La última “larga cambiada”, por el momento, ha sido la de aparcar esa reforma de la administración local que  en el mes de junio Rajoy, anunció que iba a llevar a cabo para introducir modificaciones tales como la reducción del 30% de concejales y la unificación de todos los sueldos de alcaldes, entre otros cambios. Parece ser que a Rajoy le han dicho que esto de reducir concejales y “controlar” los, en algunos ayuntamientos, muchos, el suculento sueldo de los alcaldes, no había caído muy bien entre su gente y Rajoy ha  pensado en que mejor no “meneallo”. Esta reforma la consideraba Rajoy como “una de las más urgentes”. No obstante visto la que se podía armar Rajoy ha considerado que esta reforma de racionalizar los desbocados sueldos de los alcaldes y concejales, entre otras,  no era tan urgente como la de llevar a cabo recortes tales como el no pagar a los funcionarios la extra de Navidad, y también el no revalorizar las pensiones con arreglo al IPC y tampoco pagar la diferencia a los pensionistas por el desfase del IPC durante 2012, así como recortar las ayudas a las personas dependientes y discapacitadas, recortar el subsidio a los parados y fastidiar de un modo u otro al resto del personal, con subidas de impuestos, copago de los medicamentos, pagar por acudir a la Justicia, recortar en Sanidad y Educación, abaratar el despido y así una larga lista que nos ha llevado a todos a preguntarnos que para que pagamos impuestos si tenemos después que pagar lo que antes recibíamos como una reversión de esos caudales que antes habíamos ingresado en las arcas públicas y ahora no recibimos. Lo que hacemos es pagar las prestaciones del Estado por dos veces.

Lo urgente es cabrear a los ciudadanos y contentar a esos que viven, como dijo Esperanza Aguirre, de la “mamandurria” y continuar prometiendo, lo que no sabe Rajoy, es que Dios puede que perdone a los que incumplen un juramento pero las personas, al fin y al cabo humanos, no suelen perdonar tan fácilmente a quien les ha engañado y estafado. Resumiendo: Primero prometió, después juró y finalmente mintió.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.