Economía

Las desalinizadoras valencianas

A estas alturas todos los españoles sabemos que los enormes gastos irresponsables de las diferentes administraciones públicas son la causa principal del endeudamiento del país, que nos ha llevado a perder muchos de los derechos sociales que hemos ido adquiriendo a base de años de trabajo, luchas y cotizaciones, y sin dejarnos salir de la crisis.

aguaNos da la impresión de que a los Gobernantes que hemos puesto para gestionar nuestros impuestos, les importaban más los posibles beneficios de las obras públicas, que las obras públicas necesarias para mejorar la vida de sus administrados.

Todos recordamos la campaña del PP valenciano contra las desalinizadoras:Agua para todos”,  con una manifestación a Madrid incluida. Los autobuses se llevaban a los centros de la tercera edad, donde prometían viajes gratis, con paella incluida, por solo dar un paseo por la ciudad detrás de la pancarta… Semejante ‘fiesta’ nos costó a los contribuyentes 1 millón de euros, con el deseo de activar el trasvase del Ebro y sus obras, con coste enormes, y desaconsejadas totalmente por los más eminentes ecologistas.

En la actualidad, según informes, “Las desalinizadoras de la provincia de Alicante están acabadas, pero no pueden funcionar a causa de las trabas de la Generalitat”, explica el ex presidente de la Sociedad Española de Infraestructuras Agrarias del Sur (Seiasa), el socialista Francisco Rodríguez Mulero. El antiguo responsable del Ministerio de Agricultura sostiene que el Consell siguió una hoja de ruta para boicotear las obras. “Los ex consejeros de Medio Ambiente José Ramón García Antón y Juan Cotino sabían que debían poner pegas para que las desalinizadoras no funcionaran”, relata. La inversión de las factorías paralizadas —sin incluir los gastos de mantenimiento— supera los 450 millones y su capacidad de producción rebasará los 132 hectómetros cúbicos anuales.

Las desalinizadoras de la provincia funcionan al 18% y la causa principal para no hacer funcionar la de Torrevieja son: «El 50% del agua que se captura se expulsa de nuevo al mar en forma de salmuera y ese vertido altera gravemente algunos de los ecosistemas marinos más importantes del mediterráneo, como las praderas de posidonia» Personalmente discrepo de este análisis. Torrevieja tiene una laguna de sal sin actividad, donde podrían ir los vertidos de la desalinizadora, además de que para producir mayor cantidad de sal en las lagunas de sal en funcionamiento, reciben por cinta transportadora salmuera de las minas de Pinoso, que están convirtiendo la zona en un queso de gruyere, sin pensar en las consecuencias, cuando podría utilizarse para sal no apta para consumo la salmuera de la desalinizadora, fácilmente comercializable para carreteras nevadas, etc.

Mientras tanto, la Mancomunidad de Canales del Taibilla de Cartagena, aumenta los costes del agua, con precios imposibles para los productores hortofrutícolas.

Cuatro desalinizadoras están paradas en la provincia de Alicante y se habla de poner en venta las desalinizadoras de Torrevieja y  Muxamel, por cantidades que hacen reír a los posibles compradores, ya que al ponerlas en explotación obtendrán enormes beneficios con los regadíos de campos de Golf y otras actividades turísticas.

La desalinizadora de Aguas Amargas, que produce casi el 85% del agua que se consume en la Capital de Alicante nadie la cuestiona…

Personalmente, sigo pensando que hemos tenido la mala suerte de entregar nuestra soberanía popular a personajes indignos de confianza que se han dedicado a deshacer lo que iban haciendo la administración anterior, y ahora pagamos las consecuencias con recortes a nuestros derechos sociales.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.