Ciencia

El molesto síndrome del intestino irritable

El intestino irritable se suele caracterizar por una serie de síntomas algo embarazosos. Afecta a la calidad de vida, pero algunas empresas no se conciencian de ello e ignoran la creación de nuevos productos de soja o vegetales, sin chocolate ni leche, para evitar los dolorosos síntomas.

El colon irritable, también denominado “síndrome del intestino irritable”, es un cuadro crónico y con tendencia a recaer algunos períodos. Se caracteriza por dolor abdominal, molestias durante los movimientos de las digestiones. Otras alteraciones pueden influir en esta enfermedad como intolerancias a algunos alimentos, gastritis, factores genéticos. El dolor puede ser difuso o localizarse en una zona concreta del aparato digestivo, bien opresivo o punzante. Alivia tras la visita al baño o la expulsión de los gases, acumulados por la zona abdominal.

Las alteraciones del ritmo intestinal pueden presentarse por un predominio del estreñimiento,  bien de la diarrea, o también de forma alterna de ambos. También son frecuentes la saciedad precoz tras la ingerir algún alimento, las náuseas, los vómitos, el ardor, además de la sensación de evacuación incompleta.

Para intentar evitar estos síntomas es necesario evitar una serie de alimentos que los agravan, como son:

Café, especias, alcohol, sopas de sobres, chocolate, leche y derivados como quesos, yogurt, pasteles, helados, mantequilla, dulces de navidad con manteca de cerdo… Se recomienda bebidas de soja y productos vegetales. No consumir bebidas con gas y alimentos flatulentos como la col, alcachofa, garbanzos, lentejas, cebollas, puerros, guisantes, frutos secos y en conserva. Nada frito.

Comidas copiosas. Es preferible ingerir algún alimento más frecuentemente pero menos abundante.

Alejarse de situaciones que provoquen el nerviosismo o estrés. Realizar ejercicio físico y evitar el sedentarismo.

Si predomina el estreñimiento, es aconsejable ingerir mucha fibra, como frutas, verduras, cereales…, evitando por ejemplo el plátano y la manzana cruda, mejor cocida.

El problema afecta a la calidad de vida, ya que los síntomas y las limitaciones dadas por la enfermedad empeoran la calidad de vida en diferentes escenarios de la vida de los pacientes, como las limitaciones sociales, ausencia laboral… Además de la parte económica, porque los productos que se recomiendan y sientan mejor para alejar los síntomas suelen tener precios elevados, como los productos vegetales y de soja.

Hay marcas blancas que indican en primer plano “yogur de soja”, pero al leer los ingredientes, se especifica que contiene leche entera y trazas de soja. Por eso, es necesario leer los ingredientes si no se indica que es de soja y 100% vegetal.

También hay otras empresas, mejor no pronuncio el nombre, que indican en su página web si se quiere hacer alguna sugerencia, y al hacerla, responden que tienen un equipo de profesionales que trabajan en la creación de nuevos productos y envases, y tu petición no la tendrán en cuenta. Entonces, ¿por qué expresan que se pueden hacer sugerencias a través del formulario?

Creo que es imprescindible que, quienes trabajan en pequeñas tiendas de pueblos o grandes cadenas de la capital, tengan conocimiento sobre algunas patologías alimentarias que afectan actualmente a la sociedad, como el colon irritable, acompañado por la intolerancia a la lactosa. Y vendan productos vegetales, ya que  no podemos comer nunca más chocolate, ni bombones, ni mantecados, ni trufas… Aunque, gracias a unos comprimidos de lactasa podemos comer algo de lactosa, como yogur, tarta o helado, echamos de menos productos con características parecidas, pero de soja 100% con fruta o cereales, y no tener que transportar la pastilla donde quiera que salgamos.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.