Es que se me van los pulsos ante preguntas incontestables por mi parte y con estos calores…
Entre las muchas veces que me han preguntado por eso de ‘las terceras’, alguna vez por las cuartas, elecciones generales próximas, la que más me estoy pensando, la respuesta, seguro que el paisano me está esperando, porque la verdad es que me aprecia y mi opinión la tiene en estima, ha sido: “¿No es NO es SÍ, pero a qué?”
Hice al amigo repetirme la cuestión; le dije que me iba a pensar la respuesta, después de darle alguna vuelta que otra a la pregunta: “¿Si NO es NO es Sí, pero a qué?”. Que se lo preguntase en Ferraz, como si fuera tan fácil llegar más allá del vigilante de la puerta. Que me lo pensara yo, que de estas cuestiones, me decía, tú eras un experto, al menos antes de que te desuncieran. Me desuncieron del todo por no saber responder a tu tan socrática pregunta: “¿No es NO es SI, pero a qué?”, le dije.
Si has llegado aquí leyendo, entiendes la pregunta y atisbas una respuesta, por favor, dímelo.
El compañero que me encontró en la calle me preguntó, teniéndome por entendido y la verdad es, no se lo dije a las claras, que no sé la respuesta y por eso tal vez me han desuncido de la táctica política. Porque yo en la Política estoy, como estoy en la Ética y en la Filosofía, pero a esta pregunta no sé responder, porque no habito donde se cuecen las habas.
Te repito la cuestión del preocupado, me dijo que militante socialista: “¿NO es NO es SÍ, pero a qué?”.
Si la sabes resolver me lo cuentas, se lo diré al amigo y lo publicamos en El Librepensador. Si no, el tiempo dirá.
