Sociopolítica

OBAMA Y KENNEDY: PARALELISMOS

Rasgos personales:

Instaurarán vientos de cambio y devolverán la ilusión y la esperanza a la sociedad americana, sentando los precedentes de ser los primeros presidentes  afroamericano y católico respectivamente y los presidentes electos más jóvenes de los Estados Unidos (43 y 47 años ); siendo considerados ambos iconos de su generación y quedando sus frases («ich bin ein berliner» y «yes, we can») e ideario político como herencia para las generaciones posteriores.

Dotados ambos de un innegable carisma personal, telegenia, poder de la palabra y con la ayuda inestimable de sus primeras damas (Jackie y Michelle) que dejarán su impronta personal en la decoración ramplona de la Casa Blanca y en la hierática vida presidencial americana (rememorando el espíritu de Camelot) gracias a su glamour, independencia personal y al extraordinario impacto mediático de sus viajes e intervenciones públicas.

Rasgos políticos

Atracción innegable por la Política Exterior, eligiendo ambos como vicepresidentes a senadores por Texas y Delaware con contrastada experiencia (Lyndon B. Johnson y Joe Biden) para contrarrestar su juventud e inexperiencia política, los cuales deberán asumir la presidencia del país por motivos trágicos (magnicidio ) y harán cristalizar las iniciativas inconclusas de sus predecesores en posteriores mandatos presidenciales, condenando de paso al ostracismo político al partido republicano inmerso en luchas intestinas y lastrado por la nefasta gestión de sus antecesores.

Representantes de la transición del final de la postguerra a los albores de la globalización (Kennedy) y del ocaso de la misma al regreso al proteccionismo económico (Obama), aplicando ambos medidas keynesianas como bálsamo ante la recesión económica que recibirán como herencia, resultando claramente ineficaces y favoreciendo en la mayoría de los casos a las clases altas (reducción de impuestos).

Política Interior

Presentación por Obama del Proyecto de Ley sobre Inmigración: acuciado por la exorbitante tasa de inmigrantes ilegales (rondando los 12 millones), revisará y cambiará la anterior política gubernamental sobre la inmigración, presentando un proyecto que buscará una mayor igualdad y protección de derechos civiles y laborales tanto para los nacidos en el país como para los que obtengan el derecho de residencia, rememorando la Ley sobre Inmigración y Nacionalidad, promovida por Edward Kennedy (1965) pero quedando diluidos sus efectos benéficos por la cruda realidad de la severa recesión económica.

Recuperación del espíritu del New Frontier kennedyano , plasmado en el utópico programa de Obama de destinar ingentes fondos federales para la educación y la ampliación de la cobertura de la sanidad pública. Reaparición de los Cuerpos de Paz, con cientos de jóvenes voluntarios expertos en educación, agricultura, sanidad e infraestructuras básicas que participarán en el Programa de Ayuda de Emergencia ante la crisis alimenticia mundial con especial incidencia en Antillas, Centroamérica, África Subsahariana y Sudeste Asiático.

Agudización de la fractura social del país al agravarse la crisis económica, quedando obligadas amplias capas de la población (especialmente negros e hispanos) a depender en exclusiva de los subsidios sociales y a vivir en umbrales de pobreza, lo que unido al renacer de sentimientos xenófobos en los Estados sureños y las soflamas incendiarias de nuevos líderes como Jeremías Wright, terminarán por reeditar los violentos disturbios raciales del verano de 1963.

Política Exterior

Instauración de la política de la Coexistencia Pacífica de Kennedy, tras superar escenarios de Guerra Fría con Rusia que concluirán con la firma de un nuevo Tratado de Fuerzas Convencionales en Europa (FACE), rememorando la crisis de los misiles de Cuba y la posterior firma con Jrushchov del Acuerdo de Suspensión de Pruebas Nucleares (1962).

Notable distanciamiento en política exterior de la Francia de Sarkozy (emulando a De Gaulle), debido al apoyo tácito a Israel en la invasión de la Franja de Gaza , en la consumación del nuevo muro de la vergÁ¼enza (Cisjordania) y a la retirada de tropas aliadas Europeas de Irak y Afganistán.

Aplicación de la doble vía kennedyana en su relación con los países de Iberoamérica con la creación de la Alianza Panamericana (rememorando la Alianza para el Progreso (Puerto Rico, 1961) que englobará a la mayoría de los países iberoamericanos (liderados por México, Brasil y Argentina) y conjugará la ayuda económica y la firma de acuerdos preferenciales con los países ideológicamente afines con los intentos de desestabilización de los gobiernos de corte populista-progresista (Cuba, Nicaragua, Ecuador, Bolivia y Venezuela).

Inicio de una gradual retirada de tropas de Irak y Afganistán, como consecuencia de la salida precipitada de sus tradicionales aliados occidentales y de la falta de liquidez monetaria y desorbitante deuda exterior de EEUU, rememorando la firma de retirada de efectivos militares de Vietnam (1963), la precipitada salida que se consumará en años posteriores y el ulterior y conflictivo proceso de reparto de influencias en la zona.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.