Barcelona se siente la ciudad más importante de España, aunque a muchos de sus dirigentes políticos no les gustaría estar en España, sino en la Unión Europea, y eso que la mayoría de sus ciudadanos dirían, si se les preguntara, que prefieren seguir en España, y lo de la Unión Europea ya veremos, por ello, como decía, Barcelona se siente por encima de Madrid y lucha constantemente por superarla.
Sabe que a nivel comercial y a nivel de conocimiento internacional Barcelona ha superado a Madrid, que goza del privilegio de ser el centro administrativo del país, pero que a nivel industrial está algo lejos de la ciudad condal.
De ahí su eterna reivindicación ante quien fuera menester por demostrar su importancia, por reclamar infraestructuras (para ésto sí se sienten españoles), y por mejorar los servicios al comercio y a la industria.
La importancia de la apertura del nuevo Aeropuerto de Barcelona que se ha inaugurado en el día de hoy es vital, porque permitirá doblar el número de vuelos que puedan ser operados desde Barcelona, lo cuál la convertirán en el centro neurálgico del Mediterráneo, ya que su Aeropuerto será el más importante del litoral, y le coloca en las primeras posiciones para situarse como centro de conexiones, al estilo de París, por ejemplo.
Ello supondría una inyección económica para la ciudad, ya que a mayor número de viajeros en el Aeropuerto, mayor número de visitantes a la ciudad, y mayores ingresos para los comerciantes y hosteleros. La ecuación es sencilla.
Y la solución de la misma está ya cantada. Con este nuevo Aeropuerto muchos de los vuelos que llegaban a España a través de Madrid, derivarán, ahora, a Barcelona, favoreciendo a la ciudad catalana y perjudicando a la madrileña.
Barcelona pasará, en pocos años, a dejarse de sentir como la ciudad más importante de España y pasar a serlo de propio derecho.