Se nos pintó como algo así como «un país de las Mil y una noches»; donde todo lo maravilloso del cuento musulmán tiene cabida; la realidad al parecer es que ha sido otra nueva «Torre de Babel», que falta de cimientos se ha venido o se viene abajo.
DUBAI: Puede ser otro gran infierno de «bonos basura» y que pagarán los que menos culpa tienen; de nuevo me temo, que los bandidos internacionales y que provocaron la crisis que hoy nos asola; son los culpables de esta nueva y que de ser cierta, serán cantidades enormes de dinero malgastado «en humo de cuentos fabulosos» y que como tales, se esfuman en unas rentas que se prometían fabulosas pero que no parece ser que tengan base sólida y menos continuada.
En este enclave de los pozos petrolíferos cercanos y que es un minúsculo territorio de sólo 4.114 km2 (equivalente a un tercio de mi provincia: Jaén) y que además forma parte del desierto de Arabia. Pertenece como uno más de los siete denominados Emiratos Árabes Unidos; pero cuyo sultán, ha sabido emplear sus más o menos grandes riquezas e involucrar al dinero internacional, en crear «un paraíso de este mundo pero lo más parecido en el que creen los musulmanes»; puesto que aquí y robándole espacios al mar; han creado unos costosísimos edificios con todo tipo de atracciones y apetitosos deleites, donde (supongo) no han de faltar ni las famosas «huríes del más allá».
¿Pero qué es lo que ha ocurrido? Sencillo, lo de siempre, o sea que «la obra realizada luego ha de mantenerse»; y en ese mantenimiento, la posible clientela ha fallado o está fallando de forma, que esa ciudad de las maravillas, quizá termine en el desierto inicial… «o sea como terminara la no lejana y bíblica Torre de Babel»; que según se dice estuvo por aquellas latitudes. Veamos el principio de ese desmoronamiento.
«La espita saltó el pasado miércoles por la noche, cuando el Gobierno dubaití solicitó a los inversores aplazar seis meses parte de la deuda que acumula Dubai World el gran ‘holding’ estatal responsable de algunos de los proyectos inmobiliarios más extravagantes del mundo. La congelación de pagos afecta a los 4.000 millones de dólares que debía hacer efectivos a mediados de diciembre, y ha disparado el temor a que pueda afrontar su deuda total, que asciende a 59.000 millones de dólares. La decisión asestó un duro golpe a la banca europea y asiática el jueves, la más expuesta al conglomerado estatal de Dubai. En concreto, el crédito concedido por la banca europea a Dubai World asciende a unos 40.000 millones de dólares, según Credit Suisse». ( Libertad Digital 28-11-2009)
Este importante hecho, es un nuevo mazazo a la gran crisis creada por todo estos especuladores, que con dinero ajeno, arruinan y devastan todo lo que encuentran; mientras (seguro) todos los intermediarios, habrán logrado fortunas enormes y éstas si que estarán ya en lugares seguros. Por ello hay que andarse con sumo cuidado, en quién y dónde invierte uno sus ahorros; puesto que los sinvergÁ¼enzas y bandidos siempre eluden las responsabilidades y el dinero nunca aparece.
Un consejo (si se me permite): No invierta en nada que no tenga bastante controlado y que tenga una garantía estatal de un Estado sólido; puesto que estamos viendo que todo esta minado por los bandidos de siempre y a la hora de perder, el que pierde solamente es usted; por tanto si tiene dinero; invierta a plazo fijo en entidad que considere de la máxima solvencia y a no más de tres, seis o doce meses de plazo. No se deje engatusar por intereses altos y aventuras «de La mil y una noches».