Sociopolítica

EGOÁSMO Y MIEDO HUMANOS

La frase que más abajo reflejo, ha quedado como una llamada importante para reflexionar sobre el “eterno egoísmo y miedo humano”; puesto que si bien refleja lo ocurrido en el régimen nazi, seguro que esto ocurrió en infinidad de casos análogos o similares, pero tras la derrota de Hitler, había que cargarlo a su régimen. Igualmente sabemos mucho sobre todos los judíos asesinados por los nazis, pero sabemos mucho menos de los gitanos y otros muchos, que en total sumaron muchos millones de europeos, masacrados por el igualmente sanguinario régimen hitleriano y donde no faltaron incluso muchos cientos o miles de españoles, que huidos del régimen de Franco, fueron a terminar sus vidas en los campos de exterminio y hornos crematorios alemanes del nazismo… “pero es claro que sólo los judíos han tenido la organización y fuerza mundial como para presentar a sus víctimas como casi las únicas y recabar todas las indemnizaciones habidas y por haber”. Nada que objetar, pero no deja de reflejar otro tipo de “egoísmo étnico o racial”; lo que tampoco me sorprende puesto que “de los muertos han vivido y viven muchos”… y como ejemplo lo estamos viviendo hoy en España, con esa campaña de desenterrar a los muertos de un solo bando, para hacer en definitiva lo que hicieron los otros, o sea hacer listas y colocar monumentos funerarios, que como en mi ciudad… “son grandes monumentos funerarios para una posteridad que no servirán para nada”, salvo para repetir hechos multirrepetidos a lo largo de la historia, puesto que a los muertos no se les puede dar nueva vida, pero sí sacar partido de sus muertes.

El texto a que me refiero es al siguiente.

“Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no era comunista, así que no hablé. Después vinieron por los socialistas y los gremialistas, pero yo no era de lo uno ni de lo otro, así que no hablé. Después vinieron por los judíos, pero yo no era judío, así que no hablé. Luego vinieron por los católicos y no dije nada por que yo era protestante. Y cuando vinieron a por mí ya no quedaba nadie que alzara la voz para defenderme”.

Todo el mundo atribuye esta frase a Bertold Brech, pero la dijo Martín NiemÁ¶ller, figura emblemática de la resistencia alemana al Tercer Reich, respondiendo a una pregunta de un estudiante acerca de por qué nadie se enfrentó a los nazis. Una copia del texto, según el testimonio de la esposa de NiemÁ¶ller, Sibylle Sarah von Sell, se encuentra en la biblioteca del Congreso de los Estados Unidos.

Bien es cierto que esa actitud es ancestral en el ser humano, puesto que “el miedo es libre” (que decimos en mi tierra) y ese miedo es el que paraliza cualquier movimiento, por cuanto “salvar el pellejo” es lo primero y muy pocos son los que dan un paso adelante para enfrentarse “al fuerte”, puesto que el que da el paso es el que se la juega, ya que apenas nadie hará causa común con el valiente o arrojado y de ello y a menor escala, lo vemos casi constantemente en los informativos que nos sirven las televisiones, en las que un simple gamberro (o grupo de estos) apalea a cualquier indefenso y la gente (quizá yo y llegado el caso haría igual) mira para otro lado y no se arriesga a recibir iguales golpes que el tal desgraciado está recibiendo; como le ocurriera a un buen amigo mío, el que intentando separar a dos borrachos pendencieros (jóvenes que salían de una discoteca) recibió tales golpes en el rostro, que estuvo desfigurado y sin poder salir de casa, varias semanas… tras pasar por las urgencias de un hospital de una pequeña capital de provincia.

Reciente está en España, el caso de ese profesor que por defender a una maltratada en plena calle… “por su pareja”; el energúmeno agresor, le propinó un golpe entre otros de la paliza que le propinó, al parecer no grave… pero días después entraba en coma y cuando esto escribo, ese hombre íntegro… está cuasi desahuciado y a punto de morir. Después y tras ni sabemos que padecimientos y angustias durante bastantes meses, se ha recuperado bastante, pero no en la totalidad de la vitalidad que perdió en tan brutal paliza.

Es triste… muy triste… pero “es condición humana y nuestros miedos nos acosan a lo largo de toda la vida”. ¿En qué hemos progresado?

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.