Investigadores suecos han descubierto un nuevo mecanismo de división celular en un microorganismo que crece en medios ácidos calientes. El hallazgo puede aportar nuevos conocimientos sobre los procesos clave que se desarrollan en células humanas y permitir una mejor comprensión de los principales linajes evolutivos de la vida sobre la Tierra. El estudio se ha publicado en la revista de la Academia Americana de Ciencias, PNAS.
El equipo de investigación del Centro de Biología Evolutiva de la Universidad de Uppsala (Suecia) ha identificado una maquinaria de división celular completamente nueva. El descubrimiento se ha hecho en el microorganismo Sulfolobus acidocaldarius, del grupo de las Arqueas, que fue aislado originalmente de una fuente caliente del Parque Nacional de Yellowstone en Wyoming (EEUU).
Debido a las extremas condiciones en las que vive el organismo (las células crecen óptimamente en condiciones ácidas a 80ºC), éste tiene un gran interés para diversos tipos de investigaciones sobre el origen de la vida en ambientes calientes de la Tierra primigenia y la búsqueda de vida en ambientes extremos en otros planetas. Así lo explica Rolf Bernander, autor principal del estudio.
Los investigadores han identificado tres genes que se activan justo antes de la división celular. Los productos proteicos de estos genes forman una banda angulosa en la mitad de la célula, entre los cromosomas recién segregados, la cual va constriñendo gradualmente la célula hasta que se forman dos nuevas células hijas.
“Es la primera vez en décadas que se descubre un mecanismo de división celular nuevo. Además los productos génicos no muestran ninguna similitud con proteínas relacionadas con la división celular previamente conocidas”, apunta Bernander.
Dos de las tres proteínas están relacionadas con las proteínas eucarióticas denominadas ESCRT, las cuales juegan un papel importante en la formación de vesículas durante los procesos de transporte intracelular y que intervienen también en la gemación (un tipo de reproducción asexual) de virus de la superficie celular.
Los resultados son importantes no sólo para conocer mejor la biología celular de las arqueas y extremófilos, sino también de los principales procesos celulares en el ser humano y en otros organismos superiores. Asimismo, estos datos son relevantes para la comprensión de otros aspectos relacionados con el origen e historia evolutiva de estos procesos.