Nos encontramos con un viejo conocido por la calle. Charlamos un rato y quedamos en llamarnos para hablar un día con más calma. Nos da su número de teléfono, pero no tenemos nada donde apuntarlo. Da lo mismo. Estamos cerca de casa y seguro que seremos capaces de recordar el número hasta que lleguemos y lo podamos apuntar a la agenda.
La habilidad de retener durante un periodo de tiempo breve nueva información en el cerebro es un recurso muy habitual y necesario para poder afrontar las necesidades de la vida cotidiana. Esta habilidad, conocida con el nombre de memoria de trabajo, nos permite, por ejemplo, poder retener brevemente un número de teléfono, los nombres de personas que acabamos de conocer o el camino para llegar a un lugar donde no hemos estado nunca antes.
Ya hace tiempo que los científicos sospechan que la memoria de trabajo funciona reactivando o repitiendo la información para retenerla en la mente. Aún así, esta teoría no se había podido demostrar por falta de instrumentos de medida lo suficientemente precisos. Ahora, un grupo internacional de neurocientíficos ha conseguido confirmar la hipótesis.
Los resultados se han avanzado en la edición digital de la revista estadounidense Current Biology. El estudio está coordinado por Lluís Fuentemilla, investigador del Grupo de Cognición y Plasticidad Cerebral del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) y de la Universidad de Barcelona (UB).
Los investigadores han realizado un experimento con ocho adultos sanos, a quienes se les hacía ver diferentes imágenes y recordar algunos detalles. Mediante el uso de una técnica de registro de actividad neuronal de última generación llamada magnetoencefalografía junto con el desarrollo de nuevos métodos de análisis los autores del estudio pudieron descodificar, milisegundo a milisegundo, la actividad del cerebro de los participantes asociada al mantenimiento de las imágenes en memoria.
Oscilaciones theta
Los investigadores encontraron evidencias que la información se repetía de forma continua en la mente. También identificaron que el mecanismo neural responsable de coordinar esta repetición eran unas oscilaciones rítmicas cerebrales denominadas oscilaciones theta, que se producen a una frecuencia de entre 4 y 8 herzios.
Estos resultados demuestran por primera vez que la memoria de trabajo está relacionada con la repetición periódica de información en el cerebro y que los mecanismos que coordinan esta repetición de forma periódica mejoran la precisión de la memoria de trabajo.
———————
Referencia bibliográfica:
Fuentemilla L, Penny W, Cashdollar N, Bunzeck N, DÁ¼zel E. Theta-Coupled Periodic Replay in Working Memory. Current Biology. 20, 1–7, 13 de abril de 2010.
Fuente: Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge