Con mi mayor consideración y respeto a vuestra brillante envestidura:
Quizás el resplandor que produce vuestra fulgurante presencia no le ha permitido leer el artículo o simplemente me subestima por sabe que soy un humilde escritor latinoamericano.
Solo le suplico que me extienda su cortesía y me conceda un mínimo de respeto.
No deje mis notas como pendientes por varios días, simplemente acéptelas o rechácelas como lo haría cualquier editor.
He sido aplazado varias veces escribiendo textos literarios es certámenes y me he sabido contener con los triunfos que he obtenido en otros, pero siempre dentro del mas estricto respeto. Me despido de usted con mi mayor sinceridad