Se levantó muy temprano el escritor y emprendió su viaje para buscar a Amor, lo buscó en las plazas, aldeas, de ciudad en cuidad, el escritor lo buscaba para decirle que estaba enamorado de la mujer ¡mas hermosa! que sus ojos hayan contemplado, pero buscaba a Amor para que este le ayudara a conquistar a aquella mujer.
¿Qué hago ahora? ¿Dónde estarás mendigo amor? Exclamó en voz alta. En la orilla de un río se hincó y con los brazos al cielo gritó “! Dios, tú sabes que amo a esa mujer! ¿Pero como la conquistaré?, ¿Dime como encontrar a Amor para que se apiade de este escribidor?
Pasaron unas horas y el escritor estaba tirado en el suelo, desconsolado y sus lágrimas rodaban por sus mejillas, porque se sentía herido en su corazón, ¡decepcionado! porque el amor era para muchos pero parecía que para él no.
De pronto escuchó una voz que le decía: “! Levántate y deja de llorar! Deja de estarte quejando de mí, ¿Cuantas veces traté de que te enamoraras mas sin embargo tu no quisiste?” le dijo Amor. El escritor alegre porque había encontrado a Amor le dijo: “Esta vez es diferente Amor esta es la mujer que amo, ella es la mujer que por tanto tiempo he estado esperando y al fin la encuentro ¡Tienes que ayudarme! Por favor, ¿Cómo hago para conquistarla?
¨Tienes que buscar la flor mas hermosa y llevársela como regalo” piensa donde la puedes encontrar como la expresión mas grande de amor¨. -Le contestó Amor.
Bueno tú eres muy poderoso, ¡Ya sé!, le dijo el escritor, transpórtame al pasado quiero ir a los jardines colgantes de Babilonia y traer la flor mas hermosa para ella.- Con su gran poder, Amor hizo que el escritor apareciera en la puerta de la majestuosa ciudad de Babilonia, estando allí, pidió hablar con el Rey Nabucodonosor II. El rey sorprendido ante semejante historia, pero admiraba al escritor, ya que comprendía muy bien ese amor, ya que él también amaba mucho a su esposa, “Ven le dijo te daré lo mas preciado de mis jardines colgantes, la flor mas hermosa de todas, porque sé que la amas”
– El Rey le dio ¡la rosa mas hermosa! y esplendida que el escritor se quedó ¡perplejo! ante semejante belleza, aquella hermosa rosa llevaba el nombre de la esposa del rey; Amytis.
El escritor durmió en la ciudad, al despertar se dio cuenta que estaba en la orilla de aquel río, pero en su mano estaba la flor.
Viajó a España porque allá se encontraba su amor, cuando llegó a la casa de su amada, el escritor con la flor en su mano se hico le dijo: “Viajé hasta la esplendida ciudad de Babilonia, allí encontré esta rosa, que es la rosa más hermosa, y he venido hasta aquí para decirte ¡que te amo!, y que te amaré en esta vida en las que han de venir, ¡te amaré por siempre y para siempre!’ las lagrimas del escritor rodaron nuevamente por sus mejillas pero de la emoción, un grupo de mujeres que estaban observado la escena de amor, decían: “!Que hermoso!, que hombre tan romántico, ¡Acéptelo!!Acéptelo! le decían en coro a la bella dama. Otros hombres que están cerca se decían “ Que cursi, vámonos mejor, en fin en la vida hay de todo jajá!
¿Dime que serás mi esposa y prometo amarte siempre? ¿Dime que me aceptas y que me amaras?” esta es la rosa ¡mas hermosa! que encontré en los jardines de Babilonia pero tu amor mío eres aun mas hermosa que ella, he visto muchas mujeres pero ninguna se compara a ti, ¡solo pienso en ti!, ¡tu eres mi vida!, mi sol, el oxigeno que me hace vivir, ¡la fuerza para que empuñe mi pluma!, escriba y emborrone verdades, ¡acéptame! como tu amor.” Le dijo el escritor a su amada.
La mujer le dijo al hombre que se pusiera de pie y con su mano tomó la rosa y con un tierno beso le demostró al escritor que lo amaría ¡para siempre!, en esta vida y en las que han de venir, al oído le dijo en voz baja ¡Si! te acepto.
Se tomaron de la mano y vivieron felices para siempre, el amor le ayudo al escritor para poder conquistar a esa hermosa mujer.
José Francisco Mejía Ramírez
Josefranciscoramirez1978@hotmail.com
Miembro de la Sociedad Literaria de Honduras
Articulista Nacional e Internacional.