Sociopolítica

La sucia política de… “todos los tiempos”

En uno de tantos debates sobre política (hoy todo el mundo habla de política) surgen opiniones y disparates; pero al final llega la cruda realidad y que no es otra que la de siempre… “el rebaño seguimos dominado por los pastores y sus perros” y es claro que nos siguen llevando a donde ellos quieren, o a donde empujan los pésimos gobiernos que llevan “al rebaño” a lugares donde ya… “ni hay pasto ni agua”.

Sonriendo para mis adentros y con la tristeza que da el reconocer la realidad; termino diciéndoles a mis “contrincantes” lo que sigue y que una vez escrito, lo aprovecho para un artículo más, que sé positivamente no servirá para nada.

Bueno; mi artículo ha servido para ciertos desahogos y algo es algo; puesto que la realidad es que estamos impotentes y siempre dominados por unas camarillas infinitamente mejor organizadas que nosotros y de ahí su fuerza. Con ella y teniendo «el tornillo y la llave de tuercas», van apretando todo cuanto pueden y más, puesto que no les motiva otra cosa que «el poder y el dinero»; los que no comulgan con esos “ideales” y salvo las excepciones que quieran… no se comen una rosca y tienen que irse.
¿Por qué ocurre ello en la política en general y sean los políticos del color de piel que sean? Sencillo, para mí; puesto que a la política suelen dedicarse, los más arrojados (que no valientes que es otra cosa muy distinta); los menos escrupulosos, los que son capaces de «vender su alma a quien mejor la pague»; y que ya están vacunados, contra cualquier remordimiento; así (imagino) entran en política, puesto que saben que si los principios son duros (como en cualquier oficio) si saben elegir «el patrón» y le sirven incondicionalmente (repito INCONDICIONALMENTE); a través de las espaldas del patrón, irán escalando puestos y a su vez, van sirviéndose de «otros INCONDICIONALES»; y ya metidos en ese… «caldo que en sus interiores debe ser horrible»; es que ya no se pueden salir y han de tragar con lo que sea, puesto que ni pueden decir nada de lo que sepan, ya que en tal caso… «pueden ser echados a los infiernos… o la sepultura»; y es así como yo veo la política de hoy, que es la misma de ayer y de hace miles de años. He dicho y mantengo que el hombre sigue siendo el mismo; lo que puede haber cambiado es que antes iba a pie o a caballo y hoy puede ir en avión supersónico y en otros vehículos igualmente bien dotados.
La definición más noble de la política es (para mí) la siguiente: «ES EL ARTE DE GOBERNAR BIEN A LOS PUEBLOS»… ¿Pero quién piensa en ello? También conviene saber que… «CARGO VIENE DE CARGA», QUE EL SERVICIO PÁšBLICO ES SERVIR AL PUEBLO, NO SERVIRSE DEL PUEBLO… QUE QUIÁ‰N GOBIERNA HA DE PREDICAR CON EL EJEMPLO (BUEN EJEMPLO SE ENTIENDE) ¿y qué ocurre?… ustedes mismos pueden decirlo.

En su momento lo dijo y en “épocas de aviones y automóviles”; nada menos que un presidente norteamericano, con las contundentes palabras que siguen: “En Estados Unidos (EE.UU.) el desprestigio alcanzado en los años treinta del pasado siglo, fue tal, que el Presidente, F.D. Rooselvet se  vio obligado a salir al paso con esta recomendación[i]… “Tenemos que luchar  para que la palabra político deje de ser un insulto”. No se puede decir y reconocer más en menos palabras, por cuanto huelgan comentarios… ¿qué nos espera en el presente y el futuro?… me temo que más de lo mismo, tal y como vamos viendo desarrollarse la política nacional o incluso internacional en mayoría de  países.

De ahí, el que (y es terrible) la mayoría de la juventud actual (desorientada, drogada, alcoholizada, congelada o en estado de hibernación; insensible a otras cosas que no sean los goces materiales y sin mucho esfuerzo para conseguirlo) falta de esa ilusión que incluso tuvimos muchos, en los muy duros años de la época peor del franquismo; no creen en la política de ningún signo o color.

Seguro que si se investigara el cuarenta por ciento de las abstenciones, de las últimas elecciones en Cataluña; apostaría doble contra sencillo, que en mayoría son esos jóvenes entre los dieciocho años y los treinta y cinco; que hoy despectivamente se clasifican como la generación “nini”; a la que yo pondría dos letras más, o sea “ninini”, que traducido sería ni trabaja, ni estudiani tienen ilusiones”; puesto que se las han machacado hasta un grado que ya veremos las consecuencias que ello traerá consigo y a no tardar mucho.

Como muestra un dato: En Japón es ya alarmante la cantidad de jóvenes, que simplemente se suicidan, por que –seguro- están asqueados de la vida.

Antonio García Fuentes

(Escritor y filósofo)

www.jaen.ciudad.org (allí más)


[i] Manuel Jiménez de Parga (prestigioso jurista español) en diario ABC el 04-02-1998 en su 3ª página (la principal del periódico madrileño).

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.