Sociopolítica

Manifiesto contra la violencia y por la vida

Por más que le doy mil vueltas hoy no puedo escribir sobre otra cosa que no sea en contra de la violencia y por la vida.

En estos momentos trágicos y deshonrosos para la historia de la humanidad, recuerdo que hace unos años una amiga  me comentaba que logró salvar la vida porque llegó tarde a coger un tren de cercanías, que se encontró muy cerca de un joven que decía que tenía veinticinco años y siempre había vivido en la democracia. ¡No son hermosas estas palabras!

Los días siguen espléndidos y el sol luce como siempre, pero hay muchos que ya no lo verán. ¡Cuántos padres de familia no volverán nunca a su hogar! ¡Cuántas madres desconsoladas dejarán de besar las mejillas de sus hijos con el más tierno afecto! ¡Cuántos jóvenes inquietos dejarán sus ilusiones rotas entre amasijos de destrucción!

No existe un bien material que esté por encima de la vida humana, pero sí una causa que reincida en el bien y la supervivencia colectiva de todo un pueblo. Por eso, si queremos luchar por esa causa, cambiemos el sentido de la palabra «lucha». Luchemos sí, pero desde actitudes pacifistas y nobles, y confiando en el poder de la palabra.

Diréis: «Ya lo hacía Cicerón en la antigua Roma y por ello fue decapitado. Su cabeza fue expuesta públicamente en el foro de Roma con un clavo atravesándole la frente, en señal de aquellos que querían matar el pensamiento». Pero de eso han pasado miles de años. El mundo ha conocido el progreso y el desarrollo científico y tecnológico, y no podemos seguir actuando en la barbarie. No podemos  permitir que haya niños y adultos que mueren en muchos lugares del planeta a causa de las guerras, a causa de la enfermedad y del hambre, a causa siempre de la ambición desmesurada de otros hombres que sólo crecen en la riqueza, en el poder y en  la gloria. ¡Mentes enfermizas con toda seguridad!

Pero también sabemos que la violencia engendra más violencia, que la guerra sólo engendra odio, rencor y venganza. Por eso, precisamente por eso, debemos volver a la nobleza de la palabra.

Hay un lugar para que todos podamos vivir en paz, compartiendo, intercambiando los recursos que la naturaleza nos brinda, en armonía con nuestras creencias y en el respeto de las ideas ajenas.

¡No podemos justificar la alternativa de matar!

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.