Sociopolítica

Las drogas: Un sucio negocio más

Como todos los grandes negocios de este pobre mundo (la guerra, el petróleo, la prostitución, la especulación financiera, el control de alimentos y materias primas, etc.) las drogas… son sólo eso; sucios negocios, que explotan individuos de carne y hueso, pero sin escrúpulos algunos que los moderen; o ya cogidos de tal forma por la podredumbre que los envuelve, que han de continuar o posiblemente morir, matados.

 

El negocio de las drogas tiene la peculiaridad, de que existe por cuanto hay un inmenso mercado que lo pide y mantiene; puesto que yo no sé de nadie a quién obliguen a consumir esos productos, cuyo desenlace final debe ser horrible; pero aún así, se consumen, como igualmente se consumen “ríos de alcohol y barcos de tabaco”. Reciente y aquí en España, han muerto varios jóvenes, por cuanto idiotamente fueron invitados a experimentar en nuevas drogas “autóctonas” y que se usan como veneno… alguno aún está en coma y por tanto… “más allá, que más acá”: ¡Imbéciles!

 

El consumo de las drogas tan extendido hoy (si bien siempre se consumieron drogas) es por cuanto no hay mucho interés en erradicarlo o reducirlo al máximo; y no hay interés por cuanto las cantidades fabulosas de dinero que producen y además libres de impuestos, lo impiden; puesto que el soborno a todos los niveles “abre todos los caminos necesarios para que el negocio siga floreciente”; aparte de que “políticamente”; mejor tener al pueblo borracho, drogado o entretenido en las otras drogas (falsos deportes, falsos ídolos de masas, etc.) que intelectualmente despierto y pensando en la realidad de la vida aquí en la Tierra.

 

Por otra parte la debilidad y cobardía del ser humano, en cantidades inimaginables, les obliga a huir de su triste o desesperante realidad; y una de esas huidas, siempre será el drogarse o emborracharse; sin pensar (ilusos) de que pasada la borrachera o el falso sueño de las drogas… “la realidad vuelve aún más lacerante”; y sepamos que esas realidades las padecen todas las capas sociales… posiblemente mucho más acentuado en las “clases altas”, puesto que al no tener problemas de subsistencia, sus problemas deben ser de los de… “ni imaginar podemos”; si bien ya el cine nos ha dado estampas horrorosas, del poderoso que tiene que huir de sí mismo o de su entorno.

 

Para fomentar todo ello “la política”, permite cuantas libertades sean menester y que sobre la base de ellas; el individuo aún muy joven… “vaya entrando en esos infiernos y por los motivos ya dichos”. Al que gobierna… ¿qué le importa ello? Ya estamos viendo que al que gobierna, lo que le interesa más que nada es eternizarse en el poder y para ello hará la que sea… sálvese la excepción cuando se demuestre ello.

 

Si le importara la formación de las masas, no estaría la enseñanza tan desprestigiada como lo está y existirían disciplinas razonadas, que indudablemente serían aceptadas por todos… pero ya digo, ello no interesa; es mejor “el río revuelto”.

 

Sólo la cocaína y en declaraciones de un experto, este afirma lo que sigue:

“Una tonelada de cocaína, genera alrededor de diez millones de euros. Ningún otro producto da tantos beneficios. Un kilo de ‘pura colombiana” cuesta 4000 dólares, y en Europa o EE.UU. ese kilo, cortado, puede superar los 70.000 dólares. Le añaden todo tipo de porquerías –harina, talco, azúcar, procaína, anfetaminas…- Si esnifas coca pura, puedes morir de sobredosis; si la esnifas cortada, envenenado. Unas 300 toneladas llegan a Europa y otras tantas América del Norte. Es posible que alcance las mil (cifra que se entiende anual). Por cada tonelada sin cortar salen seis o siete toneladas finales”.

 

A pesar de este aterrador informe, la gente la consume… ¿tan desesperados están? Deben estarlo puesto que si no, no se explica; aunque la ignorancia y el afán de conseguir facultades in imaginadas, sobre todo sexualmente, hace el resto; puesto que estamos hartos de saber, las mezclas de drogas que los jóvenes realizan en esas reuniones masivas donde dicen “van a divertirse”.

 

Con estos horizontes y la autoridad familiar “por los suelos”… ¿Qué hacer?

 

Pues lo que todo progenitor debe hacer cuando se atreve a traer hijos a este mundo… educarlos, formarlos, hablarle claro y crudo sobre el camino de las drogas, el alcohol, el tabaco y todo lo demás; puesto que no olvidemos que los primeros y principales responsables de los hijos, son los padres; y estos no pueden escudarse en nada, puesto que a la vista está que ni se puede confiar ni en el gobierno ni en la escuela; por tanto hay que afrontarlo con toda la integridad que se posea.

 

¿Qué es duro ello? Indudablemente; sepa el que no lo sepa aún, que el principal y más duro trabajo que traemos a este pobre mundo es el formar y educar a la generación que engendramos, para que sean útiles a la sociedad e incluso que estén mucho mejor preparados que nosotros… “y no sólo en dinero que es lo que ciega a la mayoría de humanos”… no, no sólo es el dinero; es mucho más importante “lo otro”; el dinero es un medio, nunca un fin… “el fin de poner ceros a la derecha de la cuenta del insaciable, ya estamos viendo lo que trae consigo para todos, incluso para él mismo, puesto que y es verdad… en el pecado lleva ya la penitencia… que indudablemente pagará y bien pagada”.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.