Un libro que reúne por primera vez cifras y datos sobre la industria del control migratorio
A la política migratoria en el mundo occidental no le afecta la crisis. Desde los años 90 la preocupación por la seguridad ha ido en aumento, provocando el blindaje sistemático de las fronteras materializado en faraónicas obras e ingentes inversiones. Tras el 11 de septiembre esta tendencia se radicalizó más allá de la lógica generando una industria cuyos beneficios no han parado de crecer.
La jurista francesa Claire Rodier presenta en El negocio de la xenofobia una rigurosa investigación y desvela quiénes son los beneficiarios y los damnificados de la empresa titánica de poner -literalmente- puertas al campo y controlar a los seres humanos que se atreven a burlar las fronteras.
Este libro revela así, en primicia, los nombres propios y las cifras del negocio de los controles fronterizos y los centros de detención de extranjeros, una industria que ha permanecido opaca hasta hoy.
En El negocio de la Xenofobia la autora recorre los principales focos de interés del control migratorio a lo largo del planeta. Desde el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) que se usa para controlar las aguas de las islas Canarias, Baleares y el sur de España, a las murallas que se alzan entre México y Estados Unidos o Israel y Palestina.
Con este trabajo Rodier critica la implicación política de la ultraderecha en la ideologización de la xenofobia que recorre la Unión Europea o Estados Unidos y pone al descubierto el lucrativo negocio del control de la inmigración, que se hace patente en la renovación constante de los sistemas de vigilancia de las fronteras, en la gestión de los centros de detención de extranjeros y su posterior expulsión.
Claire Rodier es jurista del GISTI (Grupo de Información y Apoyo a los Inmigrantes) y cofundadora de la red europea Migreurop. Se dedica especialmente a las políticas europeas de inmigración y asilo. Ha participado en numerosas publicaciones sobre estos temas, ha colaborado en el Atlas des migrants en Europe y coordinado, con Emmanuel Terray, la obra colectiva Inmigration. Fantasmes et realités.