Sociopolítica

134 años de socialismo español

El 2 de Mayo de 1879. Tal día como ayer hace la friolera de 134 años, un grupo de intelectuales y obreros, fundamentalmente tipógrafos, fundaron clandestinamente  el Partido Socialista Obrero Español, encabezados por Pablo Iglesias.

Placa conmemorativa fundación del PSOE en la Calle de Tetuán 12. Madrid.

Placa conmemorativa fundación del PSOE en la Calle de Tetuán 12. Madrid. Foto: Paconi

En el documento fundacional se resaltaban los valores de igualdad y solidaridad y el compromiso con los trabajadores, que inspiraron su ideario con varias utopías:  la Educación para todos, la Sanidad Universal y una pensión para cuando llegara la hora en que uno no podía trabajar…

Pablo Iglesias fue elegido Diputado a Cortes Generales y considerado por la fuerza obrera como su defensor natural.

Mucha agua ha bajado por el río desde ese momento. En el Congreso de Suresnes se hizo con la dirección del Partido el llamado ‘grupo de los sevillanos‘, con Felipe González y Alfonso Guerra a la cabeza.

Algo que comprendieron desde el primer  el momento fue que el PSOE no conseguiría ser un Partido de Gobierno, si no desaparecían sus exigencias marxistas, que de hecho se abandonaron en 29 Congreso (algo que les valió el odio a muerte de los Comunistas) consiguiendo ganar las elecciones como Partido Socialdemócrata abierto a la realización del ideario del documento fundacional,  realizándose durante los Gobiernos socialistas: La Educación para todos, La Sanidad Universal y las pensiones, incluidas las no contributivas.

Fue célebre el rodillo de Anguita junto a Aznar para conseguir que Felipe González perdiera las elecciones…

Habría ahora mucho que celebrar, sobre todo en estos momentos en los que nos quieren recortar aquellos logros… Pero la crisis económica ha confundido muchas conciencias, dando bandazos que no se puede permitir un Partido de izquierdas.

Unos no desean perder sus privilegios, y otros escuchan la voz de las encuestas sobre intención de voto y radicalizan sus posturas de  izquierda, algo desfasado incluso en los pocos  países comunistas que aún quedan.

España no es un país radical, ni lo será nunca, es un espejismo de la rabia y la impotencia que sienten los españoles al ver perder lo que tanto costo conseguir.

El PSOE debe seguir fiel a su ideario, defender sus logros y la fuerza obrera. Ese es su trabajo y su deber cuando sea Partido de Gobierno.

Sobre el autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.