EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
¡Caña a Zapatero! El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, ha salido del armario, yo esperaba que lo hiciera mucho antes, para decirnos, sin que él supiera que lo estaba diciendo, ¡dichosos micrófonos que no se cierran! que “…el problema que tenemos no es la grave crisis (…) son los años de Zapatero”.
O sea que la culpa de los que nos está pasando a los españoles, al igual que a todos los ciudadanos de diferentes países y continentes, no la tienen ni los empresarios ni los bancos. En mi opinión creo que gran parte de culpa de lo que está pasando la tiene el hecho de que, salvo honrosas excepciones, tenemos empresarios que no reúnen las con condiciones mínimas que se precisan para estar al frente de una empresa, y por tanto no disponen de la suficiente capacidad para gestionar un negocio, ni tan siquiera un mínimo de imaginación para mantenerlo en épocas difíciles como la que estamos atravesando, cuando se ven los verdaderos empresarios, los buenos gestores de una actividad empresarial, es precisamente cuando los vientos soplan muy fuertes y el barco amenaza con irse a pique. Ahí es donde se puede apreciar la pericia, la habilidad, la inteligencia y el oficio de un buen capitán para evitar que el barco se hunda. En tiempos de bonanza cualquiera puede patronear un barco.
Aunque desde la CEOE se quiera rectificar sobre lo dicho a través del indiscreto micrófono,, lo cierto y verdad es que los españoles lo tenemos crudo cuando escuchamos y leemos que desde la parte empresarial se exige como condición indispensable para sacar adelante sus industrias el que se bajen los impuestos y se abarate el despido de trabajadores. Genial el planteamiento y nefasto el hecho de que los empresarios basen la rentabilidad de sus negocios en estas dos premisas. El problema no es ese, el problema, salvo honrosas excepciones, repito, es que no se invierte en la modernización de las empresas para hacerlas más competitivas. A lo largo de estos últimos años los impuestos han bajado y la flexibilización del mercado del trabajo se ha moderado adaptándolas a las peticiones ya ancestrales de la patronal y ¿en qué se ha mejorado social y económicamente? Absolutamente en nada. La solución pasa por mejorar los medios de producción y abrir nuevos mercados, en los que se ofrezca calidad y servicio. Si una empresa se pudiera mantener solamente de lo que supone el pagar menos impuestos y mantener el empleo en precario, lo tenemos claro.
No, don Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la patronal, no son los años de Gobierno de Zapatero, son las carencias de muchos empresarios en lo que a preparación y formación se refiere lo que nos lleva a todos por la calle de la amargura. Es muy fácil cargarle el muerto al Gobierno y mirar para otro lado para no ver lo que realmente está pasando en las empresas. Puede que sea bueno abaratar el despido, yo creo que no, pero es que también se debería inhabilitar a un mal empresario, que hay muchos. Digo inhabilitar porque muchos de estos cierran su empresa echando el cerrojo sin más y dejando un buen lío tras él y luego abren por otro lado repitiendo la misma historia una y otra vez. Se dice, con esto de la crisis, que los ciudadanos, los trabajadores, han vivido por encima de sus posibilidades. Y los empresarios ¿no? No hay más que ver cómo vivían, y siguen viviendo, fuera del alcance de sus posibilidades.