Resulta muy difícil, por no decir imposible, hacerlo peor que el presidente Rodríguez Zapatero, cuya muerte política, decretada por su digital sucesor, Pérez Rubalcaba, festejaran millones de españoles depositando su voto el 20-N, menos en Andalucía, cuyo presidente de la Junta, José Antonio Griñán, igualmente producto de la dedocracia, en este caso de innombrable Manuel Chaves , ha preferido que votación y entierro se celebren en marzo-2012, y así, tanto él como sus consejeros, percibirán la paguita completa de Navidad.
Según fuentes cercanas a la Moncloa, presuntamente, los más de 600 asesores presidenciales se han declarado incapaces de hallar el más mínimo motivo o destello de merecimiento, tras haber analizado exhaustivamente la trayectoria de los casi ocho años de gobierno de su jefe para que pase a la historia. La idea de que transcurridos quince días después del 20-N solo le recuerde su familia, le tiene francamente trastornado. Así de duro se le presenta el panorama, con el agravante de que, en todo caso, la posteridad le juzgará como el peor presidente de la joven democracia española, adornado con la cobardía y soberbia del ignorante. El haberse rodeado de mediocres: Blanco, Salgado, Pajin, Aido, etc. , para que no le hicieran sombra, también tiene su precio
Que nadie se confunda. El agonizante presidente Zapatero no se va, lo han echado los suyos que no es lo mismo, y además,lo hace mintiendo una vez más. El faro y guía de la Alianza de las Civilizaciones y adalid de la incompetencia, ha repetido hasta el aburrimiento que agotaría la legislatura y no ha sido así.
Lo que no puede explicarse es como un político cuya probada incapacidad para regir un país, ha quedado manifiestamente demostrada ha podido mantenerse como presidente del Gobierno durante siete años largos. Tal incongruencia solo puede suceder en España. Quizá sea una de las causas por las cuales somos considerados “diferentes”. ETA gobernando el País Vasco, Cataluña exigiendo independencia fiscal, los mercados desconfiando y rechazando nuestra deuda, la educación a nivel tercermundista y nuestros mejores licenciados teniendo que emigrar al extranjero para poder encontrar trabajo…¿Qué más desastres nos podría proporcionar nuestro agónico presidente?
Como afirmas muchos socialistas, entre la canciller Ángela Merkel y esa “prima” que hasta hace muy poco nadie conocía en España llamada “riesgos”, le han amargado la existencia al pobre ZP. En estos últimos meses su aspecto físico denota una sustancial pérdida de peso, cabello encanecido y trajes y camisas comienzan a quedarle muy holgados, pero es que cuando las cosas comienzan a fallar, hasta el mismísimo asesor de estilo incumple sus obligaciones y pasa de su jefe pensando que pronto le van a poner el finiquito por delante.
Con relación a las últimas actuaciones del Movimiento 15-M que no impide ni disuelve la policía por orden expresa del candidato del PSOE, Pérez Rubalcaba, posiblemente ya estarán plagados de infiltrados del CNI que informan puntualmente sobre movimientos y futuras acciones. Pronto comenzaran a recibir fondos para financiar los gastos de desplazamientos, logística, manutención, publicaciones, etc. , que nadie sabrá de donde proceden…pero que tampoco demostraran excesivo interés en averiguarlo…. No obstante, convienen saber que un Gobierno que no respeta sus fuerzas de seguridad por intereses políticos, obligándoles a través de sus mandos a que soporten afrentas, insultos y humillaciones de todo tipo, corre un grave peligro y adquirirá la categoría de indeseable.
Rubalcaba, con su frase de “vamos a recuperar la confianza de la mayoría de los ciudadanos”, implícitamente está reconociendo que con Zapatero, dicha confianza estaba perdida….y eso solo es el principio. Habría que preguntarle al exministro, exportavoz y exvicepresidente si conoce el significado de “si es necesario se vende el alma al diablo”. Medios y analistas políticos están profetizando una campaña electoral durísima. Esperemos que la pérdida de papeles no sea total y recuerden que detrás de sus enfrentamientos existe algo que se llama España y los españoles.