- Adolescencia: “Los adolescentes nunca fueron tan rebeldes y nunca nos necesitaron tanto”
- “Importa más educar en la felicidad que en el conocimiento, educamos para que sean capaces de ser felices en la vida”.
Adolescencia: Necesitamos cambiar la perspectiva
Este es el principio del método Inteligencia natural. Pero, ¿cómo lograrlo durante la adolescencia? Los avances neurológicos, el conocimiento y la comprensión nos ayudan a conseguirlo, y eso es lo que nos propone José Carlos Aranda en su libro, Inteligencia natural. Adolescencia, que acaba de publicar con la editorial Toromítico.
Según el autor, esta etapa de transformación, que se inicia con la puesta en circulación de las hormonas sexuales, “afecta a la vida, al cerebro, a la forma de percibir la realidad, a la autoestima, a la forma de relacionarse con los demás y a la forma de proyectarse en el futuro. No es fácil abandonar la seguridad de la familia para enfrentarse al mundo desde la individualidad y ser capaz de soñar un proyecto de futuro. Y, sin embargo, no tenemos más remedio que abrirnos paso”.
Necesitamos cambiar la perspectiva: la adolescencia siempre se asocia a edad problemática plagada de altibajos, desencuentros, desavenencias familiares… Pero, como sucede con toda crisis, para José Carlos Aranda, “estamos ante una auténtica oportunidad, y depende de nosotros como padres y educadores que el proceso sea menos traumático, y que el resultado sea más feliz”.
Según se desprende de este ensayo, el aprender a ser adultos es una de las tareas más titánicas que se acometen en la vida, solo comparable a la primera infancia, “pero lo fundamental es que la adolescencia es el momento de las segundas oportunidades, ahora el niño podrá corregir desde la automotivación y la convicción los errores que la familia o los educadores hayamos podido cometer”, afirma el autor.
“Nunca antes fueron tan rebeldes y nunca antes nos necesitaron tanto”, asevera el autor, que no duda en desmitificar este periodo problemático, ya que se trata de una crisis necesaria para alcanzar la autonomía personal y la libertad individual. “La etapa de oposición, rebeldía, pereza, desorden, ansiedad o exaltación de la amistad, es necesaria para lograr romper el cordón umbilical, tomar decisiones y forjar un proyecto de vida propio”.
En definitiva, el adolescente tendrá que adaptarse a su nuevo cuerpo, pero también a su nuevo cerebro que aprende a mirar de una forma nueva juzgando el mundo que se le ofrece, y es en esa adaptación donde radica el éxito o el fracaso de este aprendiz de ser adulto.
Doctor en Filología Hispánica, Profesor de la Universidad Loyola, Académico Correspondiente de la Real Academia de Córdoba y profesor de Lengua Española y Literatura desde 1980. Entre sus publicaciones especializadas de carácter docente-pedagógico cabe destacar: Cómo se hace un comentario de texto (Berenice, 2009), Manual de ortografía y redacción (Berenice, 2010), Manual de redacción para profesionales e internautas (Berenice, 2011), Ortografía fácil (Berenice, 2014) y Cómo hablar en público (Berenice, 2015).
Sus inquietudes en el ámbito de la psicología y la neurociencia, ya quedaron plasmadas en El libro de la gramática vital (Almuzara, 2010) e Inteligencia natural (Toromítico, 2013); a los más de 30 años de experiencia docente, en Inteligencia Natural. Adolescencia vuelve a volcar su formación en campos como la psicología, la neurobiología y la pedagogía, a los que se acerca desde su experiencia como padre, como maestro y como tutor de miles de alumnos. Es colaborador habitual en diversos programas nacionales de radio y televisión.