No son muy remirados que digamos en el Partido Popular al menos en lo que a guardar las apariencias y las formas se refiere y lo han puesto de manifiesto con su decisión de relevar a los responsables de investigar el GÁ¼rtel y el caso Urdangarín. La Agencia Tributaria ha renovado la cúpula directiva de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) y ha nombrado a una serie de cargos de libre designación. Esto sería muy normal si no fuera porque esta decisión de Rajoy y su ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, supone el que con este cambio se va a ver afectado sin duda alguna todo lo relacionado con la investigación del caso GÁ¼rtel que como es sabido afecta de forma muy directa al Partido Popular a través de sus altos cargos, tanto orgánicos como públicos.
Esto me ha recordado lo que hizo Silvio Berlusconi, el expresidente del Gobierno italiano, cuando accedió al poder. No hizo otra cosa que proceder a promulgar nuevas leyes y a modificar otras ya existentes para de este modo salir bien librado de aquellos procesos judiciales que se habían incoado contra él desde mucho antes de ocupar la presidencia. Yo no creo que Rajoy llegue al extremo de modificar o crear nuevas leyes para evitar las posibles sanciones desfavorables que les puedan reportar las sentencias que emanen de la Administración de Justicia, entre otras cosas porque estoy seguro de que esto del GÁ¼rtel va a quedar en nada, y lo de Urdangarín también. Esta maniobra al más puro estilo berlusconiano, lo que va a propiciar es que se vuelva a comenzar a partir de cero en la investigación por parte de la ONIF y que la cosa se vaya dilatando y perdiendo en el tiempo hasta que se pudra en los juzgados y la ciudadanía le vaya perdiendo interés o lo tenga como algo normal algo que ocurre todos los días y no pasa nada, nadie sale herido, al contrario, algunos acaban con los bolsillos bien “saneados” es decir “repletos” de salud.
En cualquier caso hay que reconocer que la derecha tiene buenos estrategas en esto del chanchullo y de la pillería. Además si las cosas se les ponen feas ante la opinión pública se sacan de la manga otro código ético, creo que ya van por el cuarto, y asunto zanjado. Son listos. Muy listos.