Según un comunicado de octubre pasado, la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) inició las gestiones para patentar la vacuna, luego de que los estudios probaran su efectividad en ratones, cobayos y perros.
“Hasta donde sabemos, es la única vacuna desarrollada contra el Chagas en animales”, dijo a SciDev.Net Beatriz Basso, investigadora de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNC, que desarrolló la vacuna junto a Edgardo Moretti.
Según explicó, “en las zonas de transmisión activa del Trypanosoma cruzi —parásito que causa la enfermedad en humanos— los animales domésticos son la primera línea de alimentación de los triatominos o vinchucas (insectos vectores de la enfermedad). Si las vinchucas están infectadas, infectan a los perros o gatos. Luego éstos pueden infectar a vinchucas sanas, que posteriormente, pueden transmitir el parásito al hombre”.
Así, la vacuna interrumpiría una parte clave del ciclo epidemiológico. Para elaborarla se utilizó el Trypanosoma rangeli, parásito similar al T. cruzi, pero que no es patógeno.
En un estudio preliminar sobre la vacuna, publicado en 2007 en la revista Vaccine, tres perros fueron vacunados con tres dosis de T. rangeli cada seis semanas. Luego estos perros y tres de control que no recibieron la vacuna fueron infectados con T. cruzi.
Si bien todos los perros contrajeron el Chagas, los vacunados desarrollaron anticuerpos contra el T. cruzi y tanto el período agudo de la infección como su intensidad fueron menores que en el grupo de control.
Asimismo, vinchucas alimentadas con sangre de los perros vacunados tuvieron menor probabilidad de infectarse con el parásito.
Según Basso, “deberían vacunarse todos los animales que viven en zonas endémicas y las mascotas de personas que desarrollan actividades deportivas, como caza y pesca, en zonas endémicas”.
Para Gonzalo Vázquez, investigador de la Universidad de Emory, EE.UU., y experto en ecoepidemiología del mal de Chagas “son resultados prometedores, pero se requieren estudios a más largo plazo para estimar su efectividad y saber si los animales generan anticuerpos de por vida”.
Lo anterior, dijo a SciDev.Net, es clave dada la complejidad que puede tener la aplicación de la vacuna en el campo. “Por ejemplo, en Argentina las poblaciones rurales donde hay Chagas suelen ser de difícil acceso y en una misma casa tienen cuatro o seis perros, lo que puede implicar costos elevados, porque no se puede vacunar a uno y a otro no”.
Respecto del precio, Basso señaló que “la UNC se ha encargado del contacto con las farmacéuticas y el costo no sería elevado”.
Paula Leighton
28 noviembre 2011
SciCev.Net