Con demasiada frecuencia los partidos políticos, y principalmente sus dirigentes, tienen tendencia a pensar que las elecciones las ganan las siglas. La franco-española Ana María Hidalgo ha demostrado todo lo contrario, que en la actualidad los electores eligen a las personas por su empatía y capacidad de resolución ante los graves problemas de la ciudadanía.
Mientras, el PSF ha sufrido un duro castigo, SégolÁ¨ne Royal obtiene excelentes resultados. Por ahora, la izquierda mantiene París, Lille, Metz, Rennes, Brest, Lens, y conquista Aviñón, mientras que la extrema derecha consigue 6 ayuntamientos por primera vez desde su fundación.
He tenido ocasión de seguir la campaña electoral de Anne personalmente, hace dos semanas en mi visita a París y posteriormente por las redes sociales. Resulta alucinante el enorme trabajo realizado por el equipo de esta mujer. Ella la primera, pateándose cada distrito electoral, comercio por comercio, escuelas, hospitales, parándose con las gentes preguntando y explicando su programa. En definitiva: haciéndose querer.
Por desgracia, los políticos españoles están a cien años luz. Se creen de una casta superior, causa principal de la desafección de los españoles hacia la política.
¡Bravo Anne! Te mereces tu victoria. La has trabajado y has ganado.