EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
En todo esto del juicio a Baltasar Garzón, a mi me está dando la sensación de que los españoles estamos contemplando un hecho irreal. Anoche tuve un sueño, un extraño sueño, en el que veía como la Gestapo, las SS y los responsables de los campos de exterminio nazis, presentaban un recurso de casación ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo solicitando el amparo de este tribunal y pidiendo la anulación de las sentencias emitidas en el juicio de Núremberg contra todos los nazis que cometieron crímenes contra la humanidad al propio tiempo que denunciaban por prevaricación a los jueces que dictaron esas sentencias.
Mi sueño se podría interpretar como algo que nunca puede suceder, pero viendo lo que está ocurriendo con Garzón, creo que este sueño va más allá de lo que dijo Calderón de que “la vida es sueño y los sueños, sueños son”.