Creo que el titular de Prensa aparecido estos días “Bélgica manda a casa los emigrantes españoles que se habían quedado en paro, para no pagar el coste de las prestaciones sociales” creará incertidumbre en muchos españoles cuyos familiares han estado obligados a emigrar por la falta de creación de empleo en nuestro país.
Quienes estamos muy motivados ante los problemas de la emigración, que conocemos bien por ser emigrantes de toda la vida, sonreíamos sin ganas de tanto sarcasmo cuando la ‘Ministra de Desempleo’ nos decía que no era migración… que viajar por Europa, era simplemente movilidad laboral. Tanta nulidad parece increíble en un Gobierno que prometió crear 3,5 millones de puestos de trabajo.
Estos 300 españoles que volverán a su país con la maleta de cartón rota por la desesperanza, tienen un grave problema: Bélgica los devuelve a España porque pagar las prestaciones por desempleo supone un gasto que no quieren asumir, pero estos trabajadores cotizaron en Bélgica los últimos años que trabajaron. En España no tienen cotización, ¿qué hacemos con ellos? ¿Los mandamos a vivir bajo un puente y a comer en los comedores de Caritas? ¿Cómo va a resolver este problema la ministra del desempleo, que no se entera de nada? ¿Irá a la Blanca Paloma a pedirle que solucione ella el problema?
¡Y pensar que el PP toleraba la xenofobia practicada por la Presidenta del PP en Cataluña que junto a un alcalde repartía octavillas contra la emigración!