Uno de mis primeros puestos de trabajo fue como “Especialista en el rol de la mujer en el desarrollo” a principios de la década de 1980. A pesar de años de investigación, muchos de los problemas identificados en las décadas de 1970 y 1980 aún persisten: la invisibilidad del trabajo de las mujeres relacionado con los bosques para los formuladores de políticas, su personal de apoyo e incluso investigadores; la falta de atención a lo largo de la cadena de valor de los productos del bosque que las mujeres utilizan; la falta de voz femenina en la formulación de políticas, así como en la toma de decisiones a nivel del hogar relacionada con los bosques; y las consecuencias sobre las mujeres, tanto desapercibidas como adversas, de programas forestales bien intencionados.
En este sentido, la edición especial dedicada a “Bosques y Género” de la revista International Forestry Review ofrece un halo de aire fresco. Mientras que la comunidad científica forestal ha sido receptiva a los estudios dedicados al trabajo de mujeres vinculado a los bosques, no ha sucedido lo mismo con los estudios más teóricos y cualitativos. El uso de términos como ‘hegemonía’, ‘representación simbólica’, ‘alteridad’ y ‘habitus’ hacen que estos estudios resulten inaccesibles para los forestales. Sin embargo, esta edición especial está escrita en un lenguaje accesible y toca importantes temas teóricos y prácticos que han sido ignorados por el radar colectivo. Los autores abordan el rol activo, aunque informal, que las mujeres desempeñan en el manejo forestal (por ejemplo, Bose, Brown, Lewark et al., Shackleton et al., Shanley et al.). Cada artículo va más allá de la simple documentación para abordar temas más amplios.
Shackleton y colegas presentan los casos de tres países africanos para demostrar las diferencias existentes entre países y entre productos forestales no maderables (PFNM) en relación a las etapas de la cadena de valor y los impactos sobre género. La cuestión de la cadena de valor también es abordada por Purnomo et al., quienes llevaron a cabo investigación participativa entre productores de muebles en Java. Estos estudios sugieren a los formuladores de políticas y los investigadores forestales la importancia de hacer un seguimiento de los productos forestales más allá del bosque, de pensar y actuar teniendo en cuenta los procesos y el procesamiento.
Bose examina los efectos de la Ley de Derechos Forestales, aprobada recientemente, en dos comunidades tribales en el norte de la India. Además de mostrar los efectos adversos (no intencionados) sobre las mujeres en ambas comunidades, la investigadora identifica un patrón común y sólido que raramente es discutido: los miembros de la cultura nacional, dominada por varones, imponen sin pensarlo sus supuestos acerca de los roles de género en un sistema social mucho más igualitario, con efectos adversos potencialmente de largo alcance. Los importantes resultados de este estudio incluyen tanto la necesidad de llevar a cabo más investigación social (y más detallada) en comunidades forestales, así como la necesidad de mayor reflexión por parte de los diseñadores de políticas acerca de sus propias suposiciones.
Muchos artículos destacan la naturaleza emprendedora de las mujeres, lo que es importante para superar la percepción prevaleciente de que ellas son víctimas pasivas, incapaces de actuar ya sea en interés de la sociedad o el suyo propio. Shanley et al. documentan los vínculos que se están estableciendo en Brasil entre los movimientos de derechos humanos y los movimientos de conservación, y los roles activos que las mujeres desempeñan en la acción colectiva y la creación de redes. Las mujeres representan recursos humanos que los funcionarios gubernamentales y de desarrollo no han reconocido o usado lo suficiente para el bien común.
Sun et al. utilizan el banco de datos de largo plazo generado por la red de investigación del Programa Internacional de Recursos e Instituciones Forestales (International Forestry Resources and Institutions), junto con entrevistas y grupos focales, para examinar estadísticamente las implicaciones de la existencia de grupos de usuarios dominados por varones, grupos de usuarios mixtos o grupos de usuarios dominados por mujeres en cuatro países. Los grupos mixtos obtuvieron los mejores resultados en términos de manejo forestal, una conclusión sugerente y algo inesperada con interesantes implicaciones a nivel de políticas.
Djoudi y Brockhaus examinan las actitudes de hombres y mujeres, y sus percepciones respecto al cambio climático y las diferentes estrategias de adaptación preferidas por cada grupo en dos comunidades vecinas en Mali. Los investigadores destacan la importancia de la migración masculina y las oportunidades y desventajas que la ausencia del varón significa para las mujeres. Una conclusión fundamental de su trabajo es la variabilidad humana y ecológica a nivel local, con el resultante desafío de diseñar políticas que capturen y respondan en forma adecuada a esas diferencias.
Otros autores de esta edición especial se abocaron al estudio específico de las políticas. Bandriaky-Badji hace un seguimiento histórico de las características legales en Senegal que han contribuido a la invisibilidad de las mujeres, incluyendo la omnipresente relación masculina patrón-cliente, la falta de derechos de las mujeres sobre la tierra y el analfabetismo femenino. Brown examina las políticas de cambio climático de Camerún, tratando de buscar evidencia (sin encontrar mucha) de que los documentos de planificación y de políticas tienen en cuenta los intereses de las mujeres. Lewark et al. evalúan los impactos de la certificación forestal y de los PFNM sobre las mujeres en dos comunidades en Nepal, habiendo encontrado en términos generales percepciones positivas de la misma.
La mayoría de los artículos se centra en la variación local, ya sea entre hombres y mujeres, entre grupos étnicos, en el uso de productos forestales, y/o en el tiempo y escala. Los temas recurrentes incluyen las limitaciones para viajar que enfrentan las mujeres, el analfabetismo, la falta de derechos legales y las normas informales que las desaniman para hablar públicamente, todo lo cual interfiere con los esfuerzos de las mujeres para mejorar su situación y contribuir a un mejor manejo forestal.
Aunque prácticamente no hay duda de que el concepto de género adolece de ‘serios problemas’, los artículos de esta edición especial muestran tendencias alentadoras: 1) Mayor sofisticación por parte de los investigadores a nivel global a la hora de abordar la naturaleza holística de los temas referidos a género; 2) El desarrollo de mandatos globales como los Objetivos de Desarrollo del Milenio, destacando en muchos de ellos el concepto de género; 3) La creciente aceptación de enfoques participativos (necesarios para abordar la diversidad y las limitaciones existentes al tratar cuestiones relacionadas con las mujeres); 4) Un reconocimiento sano, aunque sea pronto para aseverarlo, de los roles de los varones en las cuestiones de género.
Aunque todos reconocemos que persisten ciertos problemas, este número especial de la revista International Forestry Review sugiere que por fin se están dando importantes avances.
Fuente: blog.cifor.org