Carta abierta a los señores diputados y diputadas del parlamento
Señores diputados y diputadas del parlamento español:
El actual debate sobre el Federalismo que agita los rangos del partido socialista, es un sÃntoma real de la enfermedad española y deberÃa ser legÃtimamente atendido por los representantes del pueblo, a pesar de que en apariencia existan otros problemas mucho más acuciantes como la crisis o el desempleo.
La crisis del Estado no es económica, es antes que nada ideológica y, por esa razón deberÃa ser tratada y resuelta en primer lugar. La organización de un nuevo pacto entre regiones independientes españolas a la manera holandesa, incluyendo las antiguas colonias del caribe como Cuba y Puerto Rico no es una quimera del siglo XXI como pudiera parecer a primera vista, al contrario. Un proyecto de organización social de esa naturaleza harÃa soplar, no sólo vientos de reconciliación nacional dentro de la penÃnsula, sino que instalarÃa duraderamente la paz y la prosperidad a los dos lados del Atlántico.
La descolonización de Puerto Rico será tratada seriamente tarde o temprano por sus nacionales o por la propia Metrópoli norteamericana, reacia a incorporar la isla definitivamente dentro de su seno. La consulta a los ciudadanos sobre qué relación polÃtica quieren entre Puerto Rico y Estados Unidos, promovida por el Ejecutivo de Luis Fortuño, se celebrará el 6 de noviembre de 2012, el mismo dÃa de las elecciones a gobernador. Es un claro ejemplo del debate que tiene lugar en estos momentos y ante el cual España no debe mostrarse indiferente.
El caso de Cuba, en apariencia más complejo deberÃa llamar también la atención de sus señorÃas. Todos los intentos de organización social aplicados en la isla hasta hoy fueron un fracaso. Empezando por el restablecimiento de la polÃtica colonial, aplicada por los liberales en España a partir de 1837 y terminando por la guerra civil, iniciada por Fidel Castro en 1953 con el asalto al cuartel Moncada. Desde entonces, se inició el perÃodo de turbulencias polÃticas más prolongado en la historia de la isla. Esta situación se mantiene desde hace sesenta años y carece de perspectivas inmediatas de resolución por la vÃa de un diálogo nacional.
España y el Caribe están en una encrucijada histórica. El proyecto federal de Estados Españoles, incluyendo el Caribe no es un desvarÃo, sino una necesidad urgente y vital para todos los hispanos.