Todo hace pensar que el dilatado Gobierno del PSOE en Andalucia, trás los últimos acontecimientos, de sobra conocidos, y los acumulados en su negra historia anterior, pronto entrará en fase de descomposición, fiel tributo a la prolongada y nefanda gestión de su presidente anterior en la Junta, Manuel Chaves. Sin duda uno de los políticos cuya mediocridad y negatividad no tiene parangón en la historia de la democracia española.
El permanente y consentido saqueo de las arcas públicas ha derivado hacia una situación de la que nadie quiere responsabilizarse de lo ocurrido y que sigue sucediendo. El verdadero problema, tristemente, será heredado por quienes les sucedan en el gobierno autonómico, cuya dificil labor inicial deberá centrarse en la recuperación de valores tan elementales y esenciales como: respeto, honradez y confianza. Tarea nada facil tras 30 años de poder socialista.
No obstante, el tandem Chaves&Griñan, tras las elecciones autonómicas de marzo 2012 (caso de no producirse un adelanto electoral), no deberian abandonar Andalucia y que su único castigo sea pasar a la oposición. Lo suyo seria que ambos respondan de sus presuntas responsabilidades ante los tribunales de justicia si se estima procedente.
El pueblo andaluz ha sido sometido a un silencioso sacrificio, soportando el ilícito enriquecimiento de muchos, conformándose con migajas administradas en forma de subsidios por parte de ciertos politicos junteros, como si se tratase de su propio cortijo. Más deleznable y humillante, imposible.
España entera vive asombrada y asqueda de lo reralizado en Andalucia con el dinero público de los parados. El ignominioso fraude cometido con los expedientes de regulación de empleo, ayudas de la Union Europea, fondos de formación profesional, etc. derivando cantidades millonarias hacia bolsillos privados y con un indice de desempleo en torno al 30% es algo de debe ser catigado severamente y no no quede en meras dimisiones.
La catastrofe moral, políca y económica que está padeciendo la ciudadania andaluza, demanda una soluciún urgente, y sin duda, el primer paso obliga a la celebración de unos comicios autonómicos ¡¡YA!!