Cinco formas de encontrar nuevas ideas y soluciones
Todos necesitamos renovar nuestras ideas, el mundo y la sociedad están cambiando permanentemente, lo que en sí mismo no tiene por qué ser ni bueno ni malo, simplemente sucede y no podemos evitarlo. Eso hace que con frecuencia nuestros argumentos de venta, nuestros planteamientos de empresa y nuestro “hábitat comercial habitual” se vayan quedando obsoletos, incluso sin percatarnos de ello o, pero aun, negándonos a verlo. Por eso todos necesitamos ideas nuevas para nuestro trabajo casi permanentemente, ¿dónde las podemos encontrar?
1.- OBSERVAR Y ADAPTAR. Si un vendedor de nuestra empresa o una empresa de la competencia está aplicando una nueva idea y el éxito es manifiesto no la critiques, mejor pruébala. Observa y adapta la idea a tu situación de negocio, modifícala para poder aprovecharla en tu sector con tus clientes o con tu producto.
2.- LEE ASIDUAMENTE. Existen revistas especializadas en cada sector, publicaciones, libros, biografías, blogs y sitios de Internet. Busca intencionadamente ideas nuevas e incluso fragmentos de ideas cada vez que estés leyendo. Recuerda que donde muchos ven problemas otros encuentran soluciones que les hacen ricos.
3.- HABLA DE TUS PROBLEMAS. Habla y conversa sobre tus problemas y las dificultades que encuentras para llevar a cabo tus proyectos, pero no lo conviertas en argumento de queja, conviértelo en una conversación constructiva con amigos y otros profesionales de confianza. A menudo basta con hablar abiertamente de los problemas y dificultades para que surjan nuevas ideas o con alguien que no esté tan implicado te plantee desde fuera nuevos enfoques que se conviertan en caminos y soluciones.
4.- ESCUCHA A TUS CLIENTES Y TUS EMPLEADOS MÁS IMPLICADOS. ¿Qué “otros” usos hace tu cliente del producto? ¿Qué quejas tiene, especialmente las del tipo ”no me sirve para…” o “lo que me haría falta es…”? ¿Qué sistema de ventas usan tus mejores vendedores? Muchas veces las mejores ideas se presentan disfrazadas de lamentos.
5.- REFLEXIONA. Tómate el tiempo necesario para centrarte en el problema y buscar posibles soluciones, estima su resultado más previsible en caso de ser aplicada, estudia su viabilidad y si tienes altas probabilidades de éxito, ponlo en marcha.
En definitiva, las nuevas ideas abren nuevos caminos y aportan nuevas soluciones. Tal y como dijo Albert Einstein: “En los momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento”.