EL CRISOL – Pascual Mogica Costa
El empleo, ese bien tan escaso, más que el agua, está creando una cierta competitividad entre famosos y políticos. Si desde hace un tiempo a esta parte, los que figuran como “punteros” en esto de la creación de puestos de trabajo son los famosos Jesulín de Ubrique, su esposa, María José Campanario y Belén Esteban, pues es innegable la enorme cantidad de personas que viven y comen a diario gracias a ellos a través de la labor diaria de contarnos la vida y milagros de estos llamados “fenómenos sociales”, a estos se les añade Mariano Rajoy, el líder del Partido Popular, que recientemente ha prometido crear, si consigue la presidencia del Gobierno de España, nada más y nada menos que cinco millones de puestos de trabajo. El hombre no se ha ido por las ramas y ha fijado una cantidad que ninguna de las estrellas de los “reality” show o de lo que se conoce como telebasura, es capaz de superar, al menos así lo creo yo.
No creo que Rajoy consiga lo que ha prometido, ni mucho menos superar a los tres famosos antes citados a través del mismo sistema, es decir, contándonos los aconteceres diarios de su vida por medio del empleo de personas en los medios de comunicación para que hablen de él. Creo que a Rajoy ya no le pega eso de que se pueda hablar de su posible divorcio, ni mucho menos decir que maltrata a su pareja, ni que le han pillado “in fraganti” con otra señora que no es la suya, que es lo que hoy en día da fama y dinero y al propio tiempo crea empleo. Me da la impresión de que Rajoy no ha sido consciente, a la hora de prometer la creación de esos cinco millones de puestos de trabajo, de las limitaciones de una persona como él, y otros muchos, normal, en lo que se refiere a poder pasar a formar parte de esos “reality” show. Considero que si confía en que dispone de suficientes “cualidades” personales para pasar a formar parte de los creadores de empleo de la talla de Jesulín, su esposa y su ex novia lo tiene bastante crudo. Me temo que no va a poder ser. El único “reality” show que da la verdadera imagen y capacidad de Rajoy, son su puntuación personal en las encuestas. Con semejante “fama” no creo que pueda emplear a mucha gente.
