CUATRO A LA MESA
Se acabó el mundo a dos, se han sentado en la mesa a jugar cuatro economías, con pretensión de ser mundiales las cuatro.
La crisis económico-financiera parece importar, en gran medida, sólo porque es un buen tema para un guión teatral interesante. Eso explica que aún estemos pendientes de la cuestión semántica, en la aparición en escena de tal o cual personaje, en el acierto del mutis ensayado. Como en un teatro….
En los Estados Unidos de América se propone rescatar a los grandes bancos secuestrados, atrapados, prisioneros y dicen que arruinados por sus aventuradas hipotecas. Mucho se mueve el Mundo. La mesa montada por Bush, Presidente de los Estados Unidos de América, a la que invitó, y aceptaron, a los aspirantes McCain (republicano) y Obama (demócrata), es la prueba que estábamos esperando de que la Economía es Política (Rajoy dio un respingo cuando lo oyó decir al Presidente Zapatero y Bush organiza el acuerdo porque de joven recibió de su padre esta lección: «idiota, es Política». Lecciones que da la vida).
Asistimos a una puesta en escena con tonos de tragedia del desequilibrio de bloques actualmente imperante tras la caída del Muro de Berlín y la desintegración de la Unión de Repúblicas Soviéticas (URSS). Se acabó el mundo a dos. Al menos se han sentado en la mesa a jugar cuatro economías, con pretensión de ser mundiales todas ellas. Esta crisis de diseño, de ingeniería financiera, se podrá arreglar de un día para otro o se prolongará, pero ya nada será igual. En la mesa están cuatro monedas que representan cuatro políticas. Los jugadores son Los Estados Unidos de América, que ya no son ni serán únicos; Europa, que de vieja estaba callada y por vieja mantiene la fuerza de la Filosofía y la Á‰tica. Japón, que tiene la tecnología, oro moderno, ya resarcido de la masacre de Hiroshima; China es la cuarta, comenzó en1949 la Revolución Cultural Maho y no se ha parado: sobre una cultura más que milenaria, sin perderla por la colonización y adaptándola al laicismo del mercado, China se ha sentado a la mesa y pide cartas.
La crisis actual es de aúpa. El repartidor de cartas ante estos jugadores, todos nuevos porque la bilateralidad se ha roto, ha de ser la Gran Política. No somos ahora más pobres, los pobres del mundo son por injusta crueldad los mismos. Sucede que hemos de comprar y vender en cuatro monedas. Jugamos con el dólar americano, el euro europeo, el jen japonés y el yuan chino.
Una crisis de la geoestrategia del Mundo, y alguien cree que se trata sólo del mutis de un personaje. Tendríais que haber oído al Diputado Aguirre increpar al Ministro Solbes, braceando y con tono airado. ¡Si Bush padre les oyera!
Manuel Pérez Castell
Diputado de España por Albacete