Se afirma muchas veces con gran orgullo e incluso rayando la egolatría «esto no es el 36» especialmente entre los que vivieron aquel terrible momento cual es el comienzo de cualquier contienda, más si cabe cuando es una contienda de tipo civil como fue la que aconteció, en la que como muy bien dijo Churchill al finalizar la segunda guerra mundial «en una guerra nunca sabemos quien gana pero sí sabemos que todos perdemos»… Los más positivos opinan «tenemos democracia» aunque es sabido que el «poder del pueblo» hace tiempo que lo tienen los que no configuran villa ni urbe ni tan siquiera lo conocen en numerosas ocasiones.
Ahora bien, retrotrayéndonos en el tiempo seguimos viendo cosas sutilmente camufladas pero de igual impacto social que lo tenían entonces.
Hoy, pleno siglo XXI, con las tecnologías rompiendo y reventando las fronteras políticas por las mediáticas, el gobernante sabe que no se puede ir diciendo cosas a la ligera pues puede ser recordado en cualquier momento lo que dijo en otro, con el consiguiente y consabido bochorno que ello debería acarrear, aunque hoy ya nadie se escandaliza de nada. Pero sí es cierto que el político que consigue conquistar los medios de telecomunicación, vease radio y tv por su rapidez mediática y prensa por su profundización y auto-reflexión en sus formatos clásicos, tiene dominada la opinión pública, callada la sociedad, y la masa duerme, tal vez impregnada de aquel somma que Huxley nos contaba en su «mundo Feliz».
¿Hay somma? ¡VIVE DIOS QUE SÁ!!! ¿Y dónde ? Es simpático, jocoso e incluso esperpéntico cuando los más antiguos dicen que «Franco nos hacía callar poniéndonos toros en la televisión todos los días», y posiblemente fuese así, lamento no disponer de edad para recordarlo por conocimientos propios pero ¿acaso hoy cree que se puede dominar poniendo toros en televsión? es claro que no, de igual modo que los políticos no fuman, beben o no van con según que mujeres, al menos en los informativos claro está, en petit comité seguramente tiene sus relaciones más o menos pintorescas pero casi todos fuman y alguno le gustará degustar buenos licores, lo cual siendo lícito es muy digno y estimulante al propio tiempo… Así pues, hubo que buscar la forma de encontrar un somma nuevo, diferente, que no merme salud, vease tabaco alcohol, drogas de diseño, que no sea antipopular, véase el festejo taurino… ¿Entonces…? Busquemos algo dinámico, de mucha actividad física donde solo viendo uno sienta que está ahí mismo, donde haya seres humanos compitiendo con seres humanos, que genere cierta violencia, no agresiva pero si la justa para todo combate cuerpo a cuerpo… pongámosle una meta a donde acudir como una puerta por donde entra el triunfador igual que hacían en la antigua Roma con los arcos de triunfo, y a la que daremos en llamar portería. Habrá que poner algo para ofrecer a modo de ofrenda a semejante triunfo, y por ser nuestro planeta esférico tal vez un balón, y siendo el varón rudo, no lo portamos con la mano sino con el pie, y así le llamaremos «balón pie» si bien todos lo conocen por el anglicismo foot-ball que ya, en un alarde de generosidad la R.A.E. ha creido bueno dejarlo en «fútbol», barbaridad lingÁ¼ística como hay pocas pero siendo la Real la que lo dice…
¿Han visto ustedes cuántas publicaciones diarias hay de cultura? ¿De poesía? ¿Literarias? ¿Artísticas en general?… bien ¿Y semanales o mensualees? comprendo. Ahora bien, ¿Saben si hay publicaciones de futbol diarias? AS, MARCA, L’equipe… Así pues.. hoy en día da igual que haya o no egolatría, si el arché de la humanidad se ha perdido, o si el latín tiene utilidad por su potencial vibracional de la propia lengua ya que hablaban nuestros antepasados o es el griego mejor porque es más antiguo… hoy señores no se puede vivir sin tener futbol en la televisión sea cual sea el equipo, el canal, o el momento, siempre, todos los días 24 horas al día, fútbol… Hemos encontrado «los toros del siglo XXI». Ya no sirve Manolete, el Juli, Manzanares, Ponce… hoy es Messi, Ronaldo, Mouriño… y quien hable en ese momento de política le firmarán lo que quiera, porque hoy en día entre sucesos, trágicos por supuesto y deportes, se llena un informativo de más de una hora,. Lo cultural es anecdótico, y en otra gran cantidad de ocasiones, el ver la situación climatológica es para saber si llevar paraguas al campo de futbol por si te vas a mojar que es más incómodo.
Sí, estamos de acuerdo, es lamentable, y yo pensando que el bueno de Ramón María exageraba cuando leí los esperpentos, tal vez porque no me gusta el futbol, seguramente…