Estaba pensativo ante el folio en blanco ,la verdad viendo cómo se comportan nuestros políticos ,uno empieza a plantearse que hemos hecho para merecer semejantes representantes con los que nadie se siente del todo identificado ,ambos partidos la oposición y el gobierno andan inmersos en sus cuitas ,mientras la gente ve como los que dicen ser sus representantes se insultan y descalifican en lugar de aportar soluciones para la crisis que nos afecta ,lo cual hace que la gente se sienta desprovista de representación real.
Algunos grupos de gente que ha empezado tímidamente a movilizarse para rescatar los principios en los que creen, es un buen comienzo, para el largo camino que tienen que recorrer.
La gente no ha parece haber entendido que de la política no hay que desentenderse porque si lo haces, otros tomaran decisiones por ti y eso no es lo más indicado.
Cierto es que la política se ha convertido en una casta de gente que su única salida profesional es la política ante la carencia de otros horizontes profesionales.
Es curioso ver como corre el dinero de comisiones de todo tipo, enchufismos personales de todo tipo, y cuidado desmedido en intereses propios.
La sociedad civil debería movilizarse para regenerar poco a poco a sus representantes y que estos fueran de un nivel cultural, ético y ecuánime un poco más alto, solo así empezarían a cambiar las cosas, mientras esto no suceda seguiremos anclados en el insulto, la descalificación y guerras personales.
Ahora con la excusa de las elecciones Vascas y Gallegas se ha iniciado una caza de trapos sucios por parte de ambos partidos mayoritarios que se enzarzan en el “y tu mas” que dista mucho de ser lo que los ciudadanos esperan de sus representantes, que tienen muy poco cuidado en las formas.
Es triste ver que la imagen de los políticos a los cuales pagamos muy bien y tienen un montón de privilegios que ningún otro ciudadano tiene.
Puestos a copiar cosas, deberíamos copiar de los americanos pues sus representantes tienen que esforzarse mucho para repetir en el cargo y luchan por los intereses de sus representados.
Aquí no hay arrestos para plantarle cara a un político y lo que es peor en caso de crítica, no se dan por aludidos una vez consiguen su puesto se aíslan y poco hacen por bajar de su nube particular.
Esperemos que esto cambie en algún momento, mientras nos queda el reducto de internet para movilizar nuestros intereses protestar y montar plataformas de política y pensamiento, de momento los políticos no creen en la red y allí aun hay un soplo de aire fresco.