Alarmados y amenazados. Así hemos entrado en el «próspero año nuevo» por expreso deseo de nuestro presidente del Gobierno y sus ministros. Sin lugar a dudas, uno de los objetos más regalados en las pasadas fiestas han sido los cinturones por aquello de recordarnos como se presenta el 2011. Nuestra única esperanza es que en la próxima hornada electoral (autonómicas y municipales) de mayo, muchos de aquellos políticos que se dedicaron a negar la crisis por encargo de Zapatero, pierdan el carguito con todas las prebendas, sinecuras y mamoneos adjuntos. El verdadero problema será para aquellos casos que no tengan a donde regresar y padezcan la amargura que conlleva el pasar a engrosar las listas del paro…
Dadas las circunstancias, conviene tener presente que el gastar lo que no se tiene, inexorablemente, conduce a la ruina. De no convocarse elecciones generales anticipadas, podrá granjearnos más desastres de los esperados que no son pocos. Símplemente analizando los recientes sondeos aparecidos en la prensa, incita a pensar que ZP tendrá que acelerar las obras de su chalet en León, dado que no podrá seguir viviendo de gorra en la Moncloa a costa de los españoles. Imaginamos que aunque solo sea en alquiler, alimentación, luz, agua, gas, vehiculos, gasolina, seguros, servicio, telefono, etc. etc. durante estos siete años, habrá ahorrado una pasta importante para pagar la decoración y los muebles del nuevo casoplón leonés.
Algo que se intuye, siguiendo la linea del pesimismo que nos invade, es que la situación de nuestras cajas de ahorros está mucho más deteriorada de lo admitido hasta el momento. Dichas entidades, presuntamente gobernadas, manipuladas y utilizadas por los responsables políticos de las distintas CC.AA., pueden originar otra «burbuja» de orden monetario y consecuencias incalculables. Curiosamente, tanto el Gobierno como la Oposición no parecen interesados en provocar auditorias esclarecedoras y esto huele mal, pero mucho más fétido va a resultar, si es el caso, cuando haya que recurrir a Bruselas e inyectarles recursos económicos del FROB. Según los entendidos, la cifra necesaria pordria oscilar entre los 15.000 y 30.000 millones de euros. Cuando el arco es tan tamplio todo hace pensar que se acercará más a la segunda cifra…
La reconversión de cajas en bancos tampoco está motivando a los consejos de administración de estos últimos, y en caso de iniciar el proceso, siempre intentarian quedarse con las más saneadas. Como única solución parece que solo cabe el acelerar y cumplir las reformas iniciadas para transmitir seguridad a nuestros acreedores y recuperar la confianza de los inversores. Todo lo demás son cuentos chinos y a estas alturas ya no engañamos a nadie. Pretender recuperar el prestogio con un gobierno como el actual seria inconcebible o milagroso. Los despilfarros, abusos y desmanes deben ser restituidos e igualmente juzgados los responsables de tales latrocinios.
Si el Gobierno del PSOE continua comportandose irresponsablemente y a la desesperada, en caso de que el Partido Popular acceda al poder con Rajoy a la cabeza, solo heredarán miseria y compañia, con lo cual, la recuperación será mucho más lenta e igualmente dependiente y tutelada por el Banco Central Europeo y el F.M.I.
Como final, la reforma de la «Negociación Colectiva», descaradamente obviada en el texto de la Reforma Laboral, no puede ser dilatada por más tiempo. En efecto el Gobierno va a contar con la fuerte oposición de los sindicatos mayoritarios, CC.OO. y U.G.T., pero nuestra productividad no puede seguir deteriorándose. La política de acallar protestas y posible compra de voluntades con subvenciones y dádivas diversas, solo sirve para maquillar superficialmente problemas puntuales que a la larga se convierten en fracasos tal como se está demostrando.
Presidente, por el bien de todos, abandone el Gobierno cuanto antes e inicie un proceso de primarias para elegir al candidato más idoneo de su partido que deberá acudir a las elecciones generales. Sería su acto más noble con el cual lograria el mayor de los reconocimientos por parte de sus compatriootas. De lo contrario, ya sabe lo que le espera. Siempre es necesario encontrar a alguien a quien responsabilizar y culpar de todo lo ocurrido, y las mayores y encarnizadas críticas, sin duda, serían aportadas por los miembros de su propio partido.