Dr. Belisario Rodríguez Garibaldo
Jurista, Sociólogo, Periodista, Analista Político, Profesor y Escritor
Miembro del Partido Revolucionario Democrático – PRD (Panamá)
E-mail: brodgari@hotmail.com
Web: http://www.pa/secciones/escritores/rodriguez_belisario.html
Al hacer una lectura de la reciente ley de salud sexual y reproductiva de Panamá que no logro el consenso para su aprobación en el parlamento nacional, realizando un sucinto análisis, pero sin hacer mención detallada al articulado, me enfoco al espíritu legal. He vivido algunos años en Europa, he decir sin ninguna duda, que Panamá esta atrasada en cuanto al desarrollo social y normativo del primer mundo, que lleva gabela en cuanto avance económico, social y político. En España hoy se tienen un parecido debate entre la Iglesia Católica y el actual gobierno progresista respecto a impartir ‘educación ciudadana’ (equivalente a la ‘cívica’ de Panamá) además de educación sexual. La mayoría de los ciudadanos españoles (y en Europa) sin importar cuales sean sus credos religiosos, siente que la Iglesia va a contravía del mundo moderno, pues existen cuestiones mínimas consabidas y aceptadas en la actualidad moderna, en educación ciudadana y sexual de adultos y jóvenes: 1- Uso de preservativos y anticonceptivos. 2- Controles ginecológicos femeninos. 3- Derecho al aborto (evitando aborto clandestino y mortalidad). 4- Respeto a la diversidad sexual y de genero, de edad y discapacidad (suscrito en Convenciones Internacionales de Derechos Humanos). 5- Tolerancia incluyente a la diversidad multicultural, racial y social. 6- Separación laica de Estado e Iglesia. 7- Laicismo en educación publica. 8- Libertad de culto e ideas. 9- Educación en valores para una ciudadanía libre, democrática y responsable. 10- Derecho a educación religiosa en centros educativos religiosos (optativa en educación publica). 11- Formar a niños y jóvenes para la complejidad de la vida moderna. En fin, es un ejemplo de la actual normativa en España, Europa y países de primer mundo, que han avanzado de sociedades atrasadas, feudales y oscurantistas, a niveles de modernidad con desarrollo económico y bienestar social mas estabilidad política democrática, donde cada quien es libre de profesar el credo religioso de su elección (cristianismo, musulmán, judaísmo, budismo, etc) o no profesar religión si así lo desea, pues de eso se trata la libertad de culto e ideas.
Ahora bien, en cuanto a educación sexual en Panamá es importante observar que los jóvenes adolescentes están practicando sexo en la actualidad, pero es importante que padres y profesores capacitados les eduquen en como prevenir embarazos no deseados, exámenes médicos, que es el VIH ó ETS y como se contagian, cuales son los usos de preservativos y píldoras anti-conceptivas, poder tener acceso a estos métodos con mas naturalidad y saber que es una sexualidad responsable, o practicar la abstinencia si es de su preferencia moral. Por ejemplo, en fiestas de carnavales panameños, el Ministerio de Salud tiene locales públicos que regalan preservativos, para evitar el contagio de VIH, ETS y embarazos no deseados. La diversidad es también propio del mundo moderno, pues además del genero hombre y mujer, de la relación de pareja hombre-mujer (a la cual prefiero como heterosexual), es necesario respetar y no discriminar otras preferencias sexuales, no caer en practicas decadentes, bárbaras y medievales de perseguir, lastimar, humillar, golpear, matar, excomulgar, despedir o expulsar a personas que sean lesbianas y homosexuales. En Europa ni en Estados Unidos esto es permitido legalmente, pues pueden arrestarte si discriminas a cualquier persona. En cuanto al aborto en la mayoría de los países modernos existen leyes que permiten a la mujer disponer de su propio cuerpo, porque cuando se prohíbe penalmente el aborto como en Panamá (con pena de prisión para la mujer y el medico), surgen los médicos clandestinos y otros abortistas no preparados que pueden crear hemorragias, mortalidad de la mujer, infertilidad, etc., así mismo como en las leyes se debe contemplar también el aborto terapéutico cuando este en grave peligro la vida de las madres si no se interrumpe el embarazo a tiempo.
Frente al suicidio asistido o eutanasia de enfermos terminales, tenemos una concepción más receptiva al mismo, considerando que debe ser un derecho de una persona en situación terminal, dolorosa y limitante, el poder disponer de un procedimiento medico adecuado para terminar con su vida, sin necesidad de hacerlo por su propia mano o con la ayuda de un tercero no idóneo, lo cual limitaría seriamente a su dignidad humana, claro esta si el enfermo terminal lo solicitase formalmente a un juez, quien evaluada la situación en particular, con la consulta idónea de médicos sobre el caso, al considerar meritos suficientes para favorecer esta decisión individual, pudiese otorgar una sentencia favorable a la misma, tal como se dispone en ciertas legislaciones modernas de algunos países modernos. Es realmente un drama humano, muy controvertido, con posiciones divergentes en donde se enfrentan sectores más progresistas y liberales en contra de sectores más conservadores, religiosos y pro vida, tal como también ocurre sobre la temática del aborto, que en algunos países es considerado aceptado legalmente el derecho de la madre a disponer de su propio cuerpo y del feto, así como en otros países (tal como Panamá) es solo legal el aborto en caso de violación sexual o en grave peligro de la vida de la madre por razón de complicaciones del embarazo (aborto terapéutico), y en otros países es ilegal el aborto, generando a su vez una practica medica clandestina o mediante abortistas no idóneos, generando una lamentable gran cantidad de mortalidad de mujeres por un aborto mal practicado. Sin embargo debemos aclarar que en todos estos casos comentados, es deber del Estado y la ley el poder velar por el interés público y social, pero sin limitar en demasía a los derechos y libertades individuales, tal como debe ser en las sociedades democráticas, modernas y civilizadas del mundo.
En torno a la problemática de las drogas ilícitas, compartimos el criterio de que la ilegalización de las drogas toxicas generan a la narco-mafia. Un libro revelador sobre el tema, que cambia a las perspectivas sobre la temática es «La Cara Oculta de las Drogas» de la criminóloga chilena Rosa De Olmos, prologado por el laureado escritor Gabriel García Márquez, quien también se adscribe en el mismo a la legalización. La ley seca contra el licor en USA a principios de siglos también resulto inoperante, generando a la mafia violenta como la del italo-americano Alfonso Capone, quienes lavaron el dinero al diseñar, fundar y construir por el mafioso judío-americano Benjamín Bugsy a la ciudad de Las Vegas, con los negocios de hoteles, casinos, prostitución, clubes, entretenimiento y medios de comunicación en esta ciudad de Nevada (EE.UU.). Para mayor muestra de tales cuestiones tenemos en la actualidad a los violentos y criminales carteles de la droga de Colombia, México, Rusia, etc., quienes a su vez lavan el dinero en paraísos financieros, fiscales y comerciales como Panamá, Gran Caimán y otros, pues el no santo y criminal ‘negocio’ de las drogas generan según estadísticas mundiales aceptadas a unos siete mil millones de dólares al año, representando el 5 % de la economía mundial, que se absorbe en la economía licita comercial, financiera, industrial e inmobiliaria del mundo mediante el lavado de dinero en el sistema financiero de la Cuenca Financiera Trilateral del Caribe (Nueva York, Panamá, Gran Caimán) o por los distritos financieros de Suiza y la City de Londres (Inglaterra).
En cuanto a la legislación nacional contra el tabaquismo, he de hacer otras consideraciones. En principio estamos a favor de la prohibición legal de fumar en lugares públicos y privados cerrados, tal como ocurre en diferentes partes del mundo, salvaguardando el derecho de terceros para evitar ser fumadores pasivos, salvo el derecho del fumador de poder hacerlo en lugares abiertos, y claro esta en su propia casa, si lo considera a bien, evitando dañar a familiares en caso contrario, pues en este caso no puede el Estado y la ley entrar a regir la forma de vida individual domiciliaria del sujeto, pues seria una forma de limitar su libertad de disposición del domicilio, el cual solamente puede ser allanado por orden de un juez en caso de realizarse un delito penal comprobado. Recordemos que la prohibición de fumar en lugares públicos, privados y cerrados de acuerdo a la ley será considerado una simple falta administrativa a la ley ambiental sanitaria que acarrea una multa para quien lo realiza o para quien lo permite como dueño de un local. No le debemos considerar jamás un crimen penal, pero si que es una afectación del ambiente y salud de terceros, contaminación que por cierto también hacen las fabricas y el transporte en mayor escala, pero sobre todo debemos tener claro que el acto individual de fumar es una adicción (enfermedad, al igual que todas las adicciones a drogas), por lo cual asiste también al adicto el derecho, si lo considera a bien, de tener un debido tratamiento contra la adicción al tabaquismo, mas no ser criminalizado por fumar, salvo la falta acarreadora de multas al contaminar a terceros pasivos en lugares cerrados públicos y privados como establece la ley, más con debido respeto al derecho a sus libertades individuales, con su derecho inviolable de disposición de su domicilio, esperando no hacerlo en aras de evitar contaminar a familiares y otros residentes.
Panamá aun no esta preparada socialmente para esta modernidad, mentalmente somos un poco conservadores, con cierta doble moral, pero esta cultura progresista de las sociedades del primer mundo les ha llevado a tener una economía fuerte, igualdad social y gobiernos eficaces. La pregunta es ¿queremos vivir anclados como una sociedad conservadora, intolerante, provinciana, atrasada económica y socialmente, o queremos avanzar a niveles superiores de desarrollo económico y bienestar social?. En Europa o Estados Unidos se puede encontrar personas que no comprenderían tal intolerancia arcaica, pasando de provinciano tercer mundista, pues si discriminas a un negro, un gay, una mujer, un discapacitado o un anciano, la policía te detiene, te multa y te cita a un juez, por violar a la ley anti discriminación. Creo sin dudas en el progreso de la civilización humana, alcanzado gracias a la democracia moderna y la ciencia-técnica, que permite a la libertad plena del ser humano, respetando las ideas, culturas, razas, sexo y religión de todos(as) los ciudadanos(as), sin privilegios ni discriminación. En Panamá, en pleno siglo XXI, debemos seguir avanzando como sociedad hacia una democracia moderna, o en su defecto vivir en una sociedad conservadora, casi feudal, corrupta, doble moral y subdesarrollada, tal como vivía Europa en el medioevo (con las hogueras de la Inquisición) y durante el nazismo (con el holocausto de los judíos en campos de concentración), o como en Estados Unidos a principios del siglo XX, cuando el Ku Klux Klan (KKK) cazaba y quemaba a negros por fanatismo racista. En una sociedad civilizada solo podemos ser intolerantes con los intolerantes. La esencia del desarrollo evolutivo de la civilización humana ha sido avanzar o estancarse, la lucha de lo nuevo contra lo viejo, de la modernidad contra diversas formas de conservadurismo. Como progresista, me inclino decidido por el progreso de la especie humana, de la utilidad de la virtud y de la fraternidad entre todos los seres humanos.
Soy un defensor del feminismo y la igualdad de género. Sin embargo debo aclarar que la realidad de América Latina es muy diferente a la de España, Europa y Estados Unidos. En América Latina aun estamos muy lejos de haber alcanzado derechos sociales plenos para la mujer y derechos sociales plenos en general. En Panamá la realidad es de subdesarrollo económico y social, donde tenemos a 50 % de la población por debajo de la línea de la pobreza, un desempleo de 13 % con un subempleo del 25 % (es decir empleomanía negativa del 38 %), donde la juventud y la mujer son los mas condicionados a la marginación laboral y social, en ciertas regiones del campo una alta tasa de desnutrición infantil y mortandad infantil (mas mendicidad infantil urbana) por enfermedades curables además de unas muy criticas infraestructuras de salud pública, en el ámbito educativo (básico, medio y superior) se carece de infraestructuras adecuadas con bajo nivel de calidad educativa y deserción educativa juvenil, una tasa elevada de criminalidad (crimen organizado, trafico de drogas, asaltos, secuestros, homicidios, etc., con cárceles que son dantescos cementerios de vivos en hacinamiento sin sanidad, dignidad humana ni rehabilitación posible), existe una corrupción publica muy alta, muchos políticos investigados por corrupción gozan de impunidad judicial y se reeligen en el cargo publico, como igual ocurre en el sector empresarial donde existe también casos de lavado de dinero en el sector financiero, comercial e inmobiliario.
Para mayor detalles el economista panameño William Hughes publico un libro «Quienes son los dueños de Panamá» donde explica la relación de las 100 familias mas poderosas económica y políticamente del país con los grupos empresariales y de poder de la nación. Además en el ámbito laboral existe un alto índice de conflicto obrero-patronal por explotación laboral, que en las ultimas huelgas obreras de 2007, la policía mato de disparos por la espalda a tres trabajadores que protestaban, sin embargo que la policía no ha sido investigada por los sucesos, pues en el sector gubernamental y judicial existe mucha complicidad, impunidad y corrupción con el sector patronal. En el ámbito de la igualdad de genero, gracias a la labor progresista del Partido Revolucionario Democrático (PRD, centroizquierda) de cada vez al estar en gobierno nacional, se han creado diversas leyes que empoderan hacia la igualdad de genero, tal como un Instituto del Mujer, un Código de Familia, el Ministerio de Desarrollo Social que incluye una Dirección Nacional de la Mujer, Ley de Desarrollo Integral de la Mujer, Ley Electoral que establece una cuota de representatividad de la mujer en las candidaturas electorales de los partidos políticos (por ejemplo la actual candidata a la Presidencia del país por el PRD para las próximas elecciones generales de mayo de 2009 es una mujer, la actual Ministra de Vivienda, Ing. Balbina Herrera), etc.
En todo caso tal vez existe cierta discriminación ‘positiva’ al varón en ciertos casos: La violencia contra la mujer y el acoso sexual laboral. En Panamá el acoso sexual laboral es visto común a favor de la mujer, pero es claro (según la doctrina jurídica internacional en la materia) que el acoso sexual laboral existe desde un perspectiva de poder y no solo de genero, es decir que puede ocurrir cuando una persona jerárquicamente superior (varón o mujer) utiliza su posición superior para imponer mediante coacción una relación sexual a un subordinado(a) que sin la cual este(a) no podría mantener su posición laboral. Al igual que en Panamá se hace mención incorrecta de la violencia domestica familiar solo contra la mujer, pero en la doctrina jurídica moderna y en otras legislaciones (incluida la legislación de España) se hace mención a ‘la violencia de género’ es decir que la violencia (física, psicológica, verbal, maltrato o abandono) se puede dar del varón a la mujer, de la mujer al varón, en el ámbito familiar domestico ó en otro ámbito (laboral, social comunitario, etc). En Panamá (como en América Latina) la estructura cultural patriarcal-machista es muy dominante, existe una estructura económica y política que en muchos casos no solo es burguesa sino oligárquica, con un caciquismo político-económico casi feudal con clientelismo de caudillismo político, un alto nivel de injusticias sociales y de violación a los derechos humanos.
Por ejemplo con respecto a la religión, el catolicismo es mayoritario en nuestros países iberoamericanos, como un ejemplo fehaciente en Panamá, existe un columnista del diario La Prensa, un sobresaliente médico epidemiólogo (Xavier Saéz Llorenz) formado en Panamá y EE.UU, de ascendente español (familia republicana y anticlerical) que ha escrito libros contra la Iglesia (el libro ‘América Latina necesita Herejes’) y artículos a favor del aborto (en Panamá es ilegal el aborto) y favorable a los métodos anti conceptivos (ni siquiera existe adecuada educación sexual en los colegios), que goza de una cierta reputación negativa en la comunidad nacional por sus ideas progresistas no solo entre la iglesia, sino en la sociedad en general (muy conservadora) y en su propia comunidad barrial (dice él mismo, que en la ignorancia y mojigatería de muchos en el país, se le consideran el diablo en persona y que gracias a que él es un destacado medico, bien puede ser respetado profesionalmente y ganarse debidamente la vida en la profesión medica, que sino a otra cosa). Es bastante posible que jóvenes varones estén frustrados por diversas razones como muestran recientes estudios sociológicos, pero no tanto por la empoderación positiva hacia la mujer, sino por los altos índices de marginación social, laboral y educativa hacia toda la juventud en general e incluida la mujer. Se debe siempre brindar mas apoyo gubernamental, social y empresarial al impulso de la igualdad de genero, a la profundización de los derechos sociales y al aumento del desarrollo económico – social en una democracia plena, empero en Panamá (igual que en nuestros países iberoamericanos) todavía parece ser utópico, a pesar que existen un aumento de niveles de vida mas alto que otras partes de América Latina, en virtud del comercio, banca financiera, sector inmobiliario, sector marítimo (Canal de Panamá), etc.
El verdadero feminismo en teoría contemporánea busca la igualdad plena de las mujeres en oportunidades, derechos y deberes equiparable el varón, bien entendiendo a la necesaria complementación de ambos géneros dentro de la sociedad, e incluyendo a la relación sana de pareja hombre-mujer. Pero existe otro feminismo mal entendido, a veces radical, que ha sido denominado como ‘hembrismo’ que seria la versión femenina del ‘machismo’: Si el hombre ha sido siempre patriarcal, la mujer ahora debe ser matriarcal; si el hombre ha sido promiscuo en su libertad sexual, la mujer ahora puede ser tan promiscua en libertad sexual; si el hombre ha sido infiel, pues la mujer ahora puede ser tan infiel; si el hombre siempre ha abandonado a la pareja, al hogar o la familia, la mujer ahora tiene el derecho de abandonar a la pareja, al hogar o la familia; si el hombre ha sido un maltratador contra la mujer, pues la mujer ahora si puede debe hacer maltrato contra el hombre, etc. En teoría jurídica la ‘violencia de genero’ incluyen a la violencia física, psicológica, verbal, maltrato y abandono, que puede ser realizada por el hombre contra la mujer, la mujer contra el hombre (también en parejas homosexuales), que puede ocurrir en el ámbito familiar, en el ámbito laboral o en el ámbito social comunal, etc, con una igual protección para los niños(as) e hijos(as) ante el maltrato. Ese feminismo ‘hembrismo’ radical mal entendido, no puede ni debe contar con el respaldo de defensores (hombres y mujeres) honestos y preclaros a favor de los derechos plenos de la mujer y la igualdad de género en el siglo XXI, pues lo único que genera esa mala visión es una incongruente ‘guerra de sexos’, ciertamente contraproducente en la sociedad moderna. La mujer y el varón deben tener una igualdad plena en oportunidades, derechos y deberes equiparables, en necesario complemento social, no en competencia social.
En la legislación panameña (Código de Familia y Código Penal) se hace mención a la violencia domestica o intra-familiar y en especial a la violencia contra la mujer. Es una herencia del Código Civil de 1919, con claro visos patriarcales y machistas. Es una discriminación positiva en aras de una protección especial a la mujer, y relativamente al menor de edad (hijos-as). Sin embargo la mayoría de la legislación internacional moderna sobre la temática, aceptada por la doctrina jurídica internacional, establecida en países Europeos y Norteamérica, con un avance mas progresista en esa área, establecen un afán de equiparación en derechos y deberes para hombres y mujeres. En muchos países europeos la legislación se refiere a la violencia de género. Esta se define como “todo acto de violencia física, psicológica, verbal, insulto y abandono, que puede ser producida del hombre hacia la mujer, de la mujer hacia el hombre, con igual protección al menor o hijos, ocurrida en parejas de hecho o en parejas homosexuales, violencia que puede ser en el ámbito domestico e intra-familiar, o en el ámbito laboral, social y comunitario”. De la misma manera se entiende la obligación reciproca del pago de una pensión alimenticia de manutención a los hijos (hasta su mayoría de edad) de parte del cónyuge (hombre o mujer) que no vive con ellos o que no tiene su custodia legal. Esta pensión de manutención se puede observar en ocasiones como una obligación de un cónyuge a otro (sea hombre o mujer) en caso de divorcio, si uno de los cónyuges resulta insolvente, hasta que el mismo consiga solvencia laboral o se vuelva a casar, cesando así a la responsabilidad del anterior cónyuge, como también la pensión de manutención de los hijos adultos a los padres ancianos en caso de insolvencia de los mismos.
La legislación internacional es mas progresistas e integral, equiparando derechos y deberes al hombre y mujer adultos en el ámbito familiar o la prohibición de cualquier violencia de genero o intra-familiar. En Panamá apenas se esta reconociendo la violencia contra el varón, por el aumento de cifras de denuncias de este tipo, que incluye el abandono de hogar, infidelidad, insulto verbal y psicológico o violencia física, cuando anteriormente se observaba esta violencia en especial contra la mujer. El caso mas significativo hace unos años (1996) fue cuando el ex presidente de Panamá, Guillermo Endara (presidente de 1989-1994), fue abordado en su residencia por cámaras de televisión, denunciando nervioso que había sido agredido por su esposa, cuñada y suegra en dicha residencia, lo que provoco una separación temporal de ambos. Desde entonces la pareja se ha reconciliado, y Endara fue nuevamente candidato presidencial en 2004 (quedando en segundo lugar en las elecciones) y es nuevamente candidato presidencial en las elecciones de 2009. La igualdad de hombres y mujeres es el reconocimiento pleno y sin ninguna discriminación en el plano legal, social, familiar, laboral, económico, comunitario, con los mismo derechos y deberes como ciudadanos de un Estado, e igual reconocimiento de los derechos del menor como ser humano.
En Panamá existen problemas de igualdad de genero aun mas graves que en la sociedades desarrolladas. En las comarcas indígenas, donde la pobreza llega al 90% de la población, de cada mujer con tres hijos, se mueren uno por desnutrición crónica, en ocasiones también muere la madre por enfermedades curables (ejemplo pulmonía), porque no hay hospitales a kilómetros de distancia. Es un ejemplo del tercer mundo que tiene graves problemas que el primer mundo no ve desde la década de los años 30, en la época de emergencia del fascismo y las revoluciones obreras. Otros problemas de genero, aun peores en Panamá: Asistenta domestica que gana 100 euros al mes sin derecho a la seguridad social y prestaciones médicas (pues así lo permite el Código Laboral), o en la Universidad de Panamá, donde estudiantes mujeres son acosadas por profesores que le exigían sexo a cambio de la calificación (actuando con impunidad y complicidad política desde las altas autoridades universitarias); para los varones también era difícil, pues en ocasiones se pueden quedar sin calificación (o repetir el curso) a menos que compren el libro del profesor o asistan a una conferencia pagada del mismo profesor en algún gremio profesional. Una educación de calidad en Panamá es una utopía, pues las infraestructuras educativas se caen a pedazos literalmente, donde líderes estudiantiles son expulsados de la universidad por participar en protestas sociales. En Panamá hay protestas sociales todos los días, todavía se asesinan a lideres sindicales, a los comunistas les sigue vigilando la policía, un periodista (Blas Julio) que fue torturado en la cárcel hace cinco años por orden de la ex presidenta Mireya Moscoso (centroderecha) viuda del ex presidente y caudillo de ultra-derecha Arnulfo Arias, en las cárceles se tortura todos los días a presos comunes, cuando la policía detiene a un prostituta mujer extranjera sin papeles, las viola repetidamente antes de deportarla a su país, etc.
El varón y la mujer nacimos para complementarnos, mas que para competir, un feminismo responsable busca la plena igualdad de oportunidades, derechos y deberes equiparables del varón y mujer, pero jamás la supeditación de unos sobre otros, actitud mas propia del machismo y el hembrismo, como he explicado con anterioridad, o del clasismo social, pues todos los ciudadanos(as) debemos ser iguales. Perspectiva de género, en Panamá (y América Latina) hay dos: la de elite política, económica, social e intelectual que vive con estándares del primer mundo, y la de la inmensa mayoría de excluidos sociales (mas de la mitad de la población que es pobre), como trabajadores, campesinos, indígenas, negros, mujeres pobres, jóvenes sin empleo, estudiantes sin educación de calidad, etc. Si el 52% de la población mundial es mujer (48% hombre), pues dos tercios de la humanidad en general que vive en el tercer mundo, aun vive situaciones de la postrimerías de la revolución industrial de principios del siglo XX – y a veces en el oscuro medioevo. Tal consideración es un llamado de atención a los países del primer mundo desarrollado para que recuerden siempre a la necesaria ayuda de cooperación al desarrollo hacia los países del tercer mundo subdesarrollado que las espera.
Debo agregar con respecto a la infancia y los derechos del menor, tanto en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, así como en la Convención Internacional de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, se establece al menor de edad, como persona humana, por lo tanto debe tener el debido respeto a sus derechos humanos, siendo por lo tanto sujeto de derechos y deberes, aunque todavía no posea la plena ciudadanía como mayor de edad. Los convenios internacionales hacen un especial énfasis en el rol tutelar del Estado en la salvaguarda y protección de la infancia, así como en establecer a las políticas sociales sobre la infancia y adolescencia para que los mismos tengan las mejores condiciones de vida posibles. El Estado respetara el rol custodio de la patria potestad sobre el menor por parte de los padres y/o tutores, sin embargo deberá a su vez ser un estricto vigilante del debido respeto de los derechos del menor en el ámbito familiar, sancionado a las infracciones legales que puedan ocurrir. Los jóvenes y niños, será evidente que como seres humanos poseen un derecho especial de prioridad dentro de la sociedad, por lo cual el Estado debe velar en todo momento por el interés general de la infancia, estableciendo la plena responsabilidad de los gobiernos para garantizar la completa protección social de los niños y jóvenes. Todos los Estados que aprobaron a la Convención Internacional de los Derechos del Niño han procurado, desde sus diversas legislaciones nacionales una paulatina adecuación a la convención internacional, en aras de alcanzar niveles óptimos de protección social de los niños y de los adolescentes, de forma tal que el Estado se faculta a través de las leyes nacionales en establecer un conjunto de principios garantes de la salvaguarda e integridad de la niñez y de la adolescencia, mediante la aprobación de diversas legislaciones nacionales que definirán claramente a los derechos y deberes, obligaciones e infracciones del menor dentro de la sociedad, fundamentalmente a sus derechos humanos como persona humana, pero de igual forma en el ámbito penal, civil, laboral, educacional, alimentario, sanitario y salud, vivienda, protección social especial, protección contra el maltrato y abuso del menor, derecho a una vida plena y ambiente sano, etc.
Citando al filosofo y sociólogo Edward Said (Premio Príncipe de Asturias de las Ciencias Sociales) que en su obra ‘Orientalismo’ nos dice en una parte: «Occidente y el primer mundo suele medir a oriente, a países del sur y al tercer mundo con los estándares de sus propias sociedades desarrolladas, por los cuales demuestran un gran desconocimiento de sus realidades, condescendencia superior, estigma etiquetador muy rico en clichés culturales, etnocentrismo cultural e injusto tratamiento social desde los países centrales hacia los países periféricos, contribuyendo así ha abrir mas a la amplia brecha existente del debido mutuo entendimiento, el justo mutuo conocimiento y necesario mutuo acercamiento cultural, además de las adecuadas ayudas al desarrollo que contribuyan a la corrección de la antiguas injusticias históricas coloniales que aun condicionan a las actuales estructuras políticas del tercer mundo el subdesarrollo económico, social y cultural, que mantiene vigencia en el distanciamiento y permanente conflicto de las diversas problemáticas entre el Norte-Sur y Occidente-Oriente de nuestro tiempo».