Ciencia

El desarrollo sostenible necesita más que la economía verde

El desarrollo sostenible en Ecuador debería considerar medidas para mitigar el cambio climático y la consolidación de capacidades de las comunidades locales, además de una economía verde, dijo a CIFORla Viceministradel Medio Ambiente de Ecuador.

Una economía verde no es una alternativa al desarrollo sostenible y todavía no ha rendido los resultados esperados, dijo la Viceministra del Medio Ambiente de Ecuador, Mercy Borbor Córdova.

“Los países en desarrollo deberían tener acceso a nuevas tecnologías más allá de los objetivos de productividad y crecimiento económico.”

Borbor se refirió al esquema único de Ecuador “Emisiones Netas Evitadas”, que se está promoviendo en foros internacionales. El esquema considera que los países compensen a la industria de recursos naturales de Ecuador por limitar sus emisiones en la atmósfera.

La iniciativa Yasuni-iTT por ejemplo, es fundamental para el esquema y se enfoca en la protección de uno de los bosques de mayor megadiversidad del mundo, y que es hogar del grupo Indígena Waorani.

Ecuador propuso Yasuni-ITT enla AsambleaGeneraldela ONUen 2007. El mecanismo recibe pagos de fuentes nacionales e internacionales por mantener intactos los recursos petroleros de Ishpingo-Tambococha-Tiputini (ITT)– ubicados en el Parque Nacional Yasuni.

En 2011, el gobierno ecuatoriano anunció que había logrado su meta de 100 millones de dólares durante el primer año de recaudación de fondos para Yasuni-ITT, y espera lograr 300 millones de dólares para fines del tercer año.

Borbor dijo igualmente que era importante consolidar mecanismos económicos para apoyar a las comunidades y grupos indígenas en el acceso a alternativas que les permitan usar sus recursos naturales en formas sostenibles.

Ecuador está proponiendo otras alternativas a nivel internacional. Por ejemplo, el Esquema Tributario Daily-Correa impone impuestos a los países que usan combustibles fósiles. El impuesto se usará en programas de conservación e inclusión social, tales como la capacitación a las comunidades en la gestión del bosque o en transferencia de tecnología para la mitigación del cambio climático desde los países desarrollados a los países en desarrollo.

Borbor dijo que las medidas para prevenir la deforestación también deberían servir para brindar a las comunidades la oportunidad de un mejor manejo forestal.

“En Ecuador vemos el esfuerzo para evitar la deforestación como una oportunidad para que las comunidades desarrollen sus capacidades y aprendan como gestionar sus bosques. No lo hacemos con fines económicos.” “Queremos lograr la sostenibilidad mediante el compromiso y aprendizaje de las comunidades que son propietarias de los recursos. Ellos son los dueños, y es una responsabilidad compartida del gobierno y de la sociedad que ellos tengan la capacidad y los recursos para proteger sus bosques y generar sus propios medios de subsistencia.”

Ecuador llegará con estas propuestas a Rio+20, Conferencia sobre Desarrollo Sostenible dela ONU, en junio, que son parte de las propuestas del esquema Emisiones Netas Evitadas y que buscan reducir las emisiones, conservar la biodiversidad y reducir los impactos derivados de la deforestación y de las actividades de extracción de petróleo, entre otras, en los bosques y en otros ecosistemas importantes, dijo Borbor.

“Debemos reconocer tanto los derechos como los límites de la naturaleza como elementos cruciales para el desarrollo de cualquier país. Una vez que identifiquemos sus límites, podremos definir cómo gestionarlos mejor.

Igualmente hizo un llamado a la comunidad internacional para que cumpla sus compromisos antes de establecer nuevos objetivos.

“Han pasado veinte años desde el establecimiento de la Agenda 21, iniciativa de las Naciones Unidas sobre el desarrollo sostenible”, dijo. “No podemos adquirir nuevos compromisos cuando todavía tenemos varios que no se han cumplido”.

Con el evento próximo a realizarse, la ministra pidió a los países desarrollados que mejoren su contribución en la protección del medio ambiente.

“Pensamos que los países desarrollados deberían ayudar más, porque son los mayores emisores de gases de efecto invernadero, contribuyendo al cambio climático.”

“Deberían dar más, no solamente a Yasuni ITT, pero en general, para ayudar a los países en desarrollo en aspectos como transferencia de tecnología y capacitación, que permita a estos países comprometerse con temas de desarrollo sostenible y cambio climático”, dijo Borbor.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.