El día de las víctimas

El Congreso de los Diputados, por unanimidad, ha instituido el día 27 de junio de cada año el día de las víctimas por terrorismo. El acuerdo se tomó, cuando, la elegida representación de España, recordaba, unida, la masacre en Madrid de las 192 personas inútilmente asesinadas, con alevosía, por un grupo terrorista islámico. En las tribunas del Palacio de las Cortes, se contaba  la representación de las asociaciones de víctimas de los crímenes del 11M; la Presidenta de la Comunidad y el Alcalde de Madrid; las respectivas Presidencias del Tribunal Supremo y del Constitucional, que fueron acomodadas en sendas sillas;  En sus escaños,  el Presidente del Gobierno y sus señorías parlamentarias al pleno, presididas por José Bono Martínez, Presidente del Congreso, acompañado de su homólogo del Senado, Javier Rojo. Reunidas las Cortes del Reino de España, aclamaron instituir  el 27 de septiembre día de las víctimas y celebrar  “la dignidad de las personas, freten al fanatismo de las desalmadas asesinas”.  José Bono, solemne, confesó el “no estáis solos: consideraríamos un segundo crimen el olvido”. La solemnidad de la sesión de Cortes se roció con las lágrimas de los familiares, que desde las tribunas, humedecieron las palmas de las manos, que, como alas, aplaudimos el recuerdo, el dolor por la muerte y  el respeto  por la vida. El 27 de junio de 1960, ETA asesinó por primera vez. La víctima: María Begoña Urroz Ibarrola, niña de 22 meses, que gozaría hoy de 52 años. La proclamación de la efemérides exige “recorrer con vuestra mirada, sin rencor,  el camino para acabar con ellos”; aconseja “unidad contra el terror: prometemos permanecer juntos hasta vencerlos”. El 11M de 2010, a los seis años del cruel viaje a Atocha del 11M de 2004, las Cortes de España proclamaron el día de las víctimas el 27 de junio de cada año, en memoria también de aquel 27 de junio de 1960 en que la niña de 22 meses, María Begoña Urroz Ibarrola, fue asesinada por ETA.