La composición del océano se mantuvo rica en hierro y carente de oxÃgeno durante 1.000 años más de lo que se pensaba, según investigadores de la Universidad de California en Riverside. El estudio propone un cambio en la distribución de los nutrientes esenciales para la vida en el océano a lo largo del tiempo.
El océano pudo tener un alto contenido de hierro y ausencia de oxÃgeno durante 1.000 millones de años más de lo que estimaba hasta ahora. Esa es la conclusión que ha publicado un grupo de investigadores de la Universidad de California (UC) en Riverside (EE UU) después de analizar muestras de rocas recopiladas en diversos puntos del planeta. Los cientÃficos afirman que en la ventana temporal entre hace 1.800 y 800 millones de años –clave en la evolución de la vida–, el hierro aún dominaba las profundidades oceánicas.
“Tenemos pruebas locales que son difÃcilmente refutables. Y nosotros creemos que estas condiciones estaban extendidas en todo el océanoâ€, asegura a SINC Iqbal Pittalwala, de la UC. Las observaciones sugieren una hasta ahora desconocida composición regular del océano durante el 90% de la historia de la Tierra.
La mayorÃa de los cientÃficos coinciden en que hasta hace 2.400 millones de años, la composición de los mares fue continua, con pocas trazas de oxÃgeno y predominio de hierro disuelto. Pero desde entonces hasta hace 500 millones de años, la evolución quÃmica no está tan clara. En este periodo intermedio comenzó la oxigenación atmosférica y el aumento de la diversidad de organismos vivos.
La explicación clásica estipula un incremento del oxÃgeno en los océanos paralelo a su primera acumulación en la atmósfera, y relaciona la desaparición de los grandes depósitos de mineral de hierro con la oxigenación de los mares. Pero hace una década surgió otra hipótesis: el ácido sulfhÃdrico, producido por bacterias en ausencia de oxÃgeno, pudo eliminar los depósitos de hierro en los océanos.
Implicaciones en el desarrollo de la vida
En los últimos años varias lÃneas de investigación han rechazado este modelo del ácido sulfhÃdrico. En un océano repleto de este compuesto desaparecerÃan muchos de los elementos que sostienen la vida. “El año pasado, varios grupos propusieron la teorÃa que nosotros probamos en este estudio: la presencia de océanos profundos anóxicos [sin oxÃgeno] pero no sulfhÃdricosâ€, expone Pittalwala.
“Las implicaciones de este trabajo son muy ampliasâ€, apunta Timothy Lyons, de la UC. De hecho, habrá que replantear la supuesta escasez de nutrientes atribuida hasta ahora a la propagación de ácido sulfhÃdrico. Aunque, según los investigadores, el nuevo modelo tampoco supone una gran ventaja para la vida. «PodrÃa haber suficiente ácido en los bordes como para limitar algunos nutrientes fundamentales», señala Lyons.
Además, los cientÃficos sugieren que la distribución de los materiales de hierro estaba controlada por otro mecanismo: sistemas hidrotermales en el fondo marino. Estos sistemas son ventilaciones de altas temperaturas en el suelo del mar, que pueden bombear enormes cantidades de hierro al océano.
Fuente: SINC